Cultura

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La fototeca de la Diputación recibe 60.000 imágenes de Fernando Biarge

Durante cincuenta años ha captado con su objetivo los avances y cambios en el territorio altoaragonés

La fototeca de la Diputación recibe 60.000 imágenes de Fernando Biarge
La fototeca de la Diputación recibe 60.000 imágenes de Fernando Biarge
DPH

HUESCA.- Cuando se cumplen los treinta años de la Fototeca Provincial, el Presidente de la Diputación de Huesca, Miguel Gracia, y el conocido fotógrafo Fernando Biarge han suscrito el acuerdo que marca un hito al tratarse del fondo más amplio, con alrededor de 60.000 imágenes pertenecientes a "un gran divulgador de la provincia que ha sido testigo directo de la evolución del territorio en el último medio siglo", tal como ponía de relieve el máximo responsable de la DPH al referirse a un archivo que se caracteriza por su elevado interés documental.

Después de la adquisición del fondo de Ricardo Compairé con el que se inicio el trabajo pionero en conservación de la imagen, la Fototeca da ahora un paso fundamental en su proceso de consolidación con otro de los fotógrafos fundamentales para documentar el periodo desde los años 70 hasta este siglo, de la misma forma que el primero lo fue para las décadas de los 20 y 30.

"El valor de este gesto es difícil de cuantificar", han sido las palabras de Miguel Gracia para hacer pública la gratitud a una de las familias que "ha contribuido a situar este archivo fotográfico de ámbito territorial una referencia en el país" que supera ya los más de 400.000 documentos fotográficos y audiovisuales de diversas procedencias. "Un logro colectivo" -ha querido destacar- porque "entre todos estamos consiguiendo salvaguardar el patrimonio y las imágenes de la memoria colectiva de esta provincia".

¿Qué hacer con una colección que se acerca a las noventa mil imágenes referidas casi en exclusiva a un territorio concreto? Esa pregunta se hizo hace unos años el propio Fernando Biarge, del que hoy ha quedado patente que su gran vocación ha sido y es la fotografía poniendo el objetivo en el territorio altoaragonés, ya sea con grupos de montañeros, en familia o en solitario. También que tiene una forma particular de ver la provincia, contempla con realismo sus espacios, diversidades y facetas entre las que se encuentra el paisaje, sus gentes y costumbres.

LARGA TRAYECTORIA

Fernando Biarge, el mediano de tres hermanos y nacido en 1940 en Huesca, recuerda de su infancia la multitud de excursiones a las que sus padres le llevaban. Poco después de iniciarse en la fotografía, "enseguida fui consciente de que estaba viviendo una etapa importante en la vida y las circunstancias del Alto Aragón con la pérdida de la sociedad tradicional, el impacto de la emigración y la desaparición de pueblos, aldeas y lugares", tal como se ha expresado.

Este fotógrafo oscense comenzó sus salidas con un Seat 850 y su primera máquina, una Voigtländer Vitomatic, a comienzos de los años sesenta. Y hoy tras firmar el convenio por el que se hace efectiva la donación decía que "es toda una vida, son cincuenta años seguidos de trabajar un día sí y otro también fundamentalmente en el tiempo libre que me dejaba el trabajo de ejecutivo en una empresa".

La fotografía, según narra, "también me ha servido como la mejor herramienta para explicarme y una cierta vocación didáctica" y daba como dato las 2.285 proyecciones y conferencias, "lo que supone una a la semana durante 45 años seguidos", apuntaba. A esto hay que sumar los 70 libros y 11.158 fotografías publicadas, más de 200 colaboraciones en libros y revistas, 13 audiovisuales o las 20 exposiciones producidas.

Hay momentos puntuales en su trayectoria que destacan por la búsqueda de lo diferente, de lo que en ese momento aún está por divulgar, como es el caso de la ampliación del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, el lanzamiento del barranquismo, la conservación de materiales gráficos antiguos, la promoción del territorio altoaragonés, la publicación de materiales etnográficos, la elección de temas de naturaleza faltos de atención, las formas de vida y las circunstancias del abandono, a medio camino entre la naturaleza y el paisaje humanizado.

Esta variedad viene dada por el "interés" y "una enorme curiosidad" como él mismo reconoce y que le permitieron abordar y ocuparse de "un sinfín de temas". Si se toma como base la organización de sus álbumes, Biarge explica que el número de conceptos distintos llega a 97 y están divididos en cuatro grandes apartados: naturaleza; territorio y entorno humano; recursos y trabajo del hombre; y arte y patrimonio.

Su esquema de trabajo se orientó desde un principio hacia la consecución de un amplio archivo fotográfico, así ya se han ingresado más de 40.000 imágenes y se llegará a las 60.000 como se ha explicado, con un carácter casi enciclopédico de este fondo sobre un territorio tan concreto como la provincia de Huesca porque como detalla Biarge "de los 250 álbumes en los que están las fotos prácticamente todos son de aquí".

Entre quienes han asistido este lunes a este acto también estaba el expresidente de la Diputación, Aurelio Biarge, hermano de Fernando y el parte de su familia, además del presidente de la Comisión de Cultura, Francisco Mateo, la delegada de Cultura, Berta Fernández, junto a otros diputados, técnicos del área de Cultura y colaboradores de la Fototeca.

HOMBRE POLIFACÉTICO Y LIGADO DESDE SUS INICIOS A LA FOTOTECA

Fue promotor y primer responsable de la Fototeca en una labor que se extendió desde 1990 hasta 2002, tiempo durante el que se llegaron a producir cerca de una veintena de exposiciones y 15 ediciones de libros.

El resto de ambas trayectorias también han estado ligada de una forma u otra, ya que el 20 aniversario del centro coincidió con la publicación del conocido título Sobrarbe, letra menuda, a los 25 llegaría la exposición monográfica como retrospectiva de su trabajo que culmina ahora cuando cumple 50 años de una intensa y dilatada actividad recoge garantizar el valor, la actualización y el uso, y realizarlo de forma conjunta.

Hombre polifacético, con una breve experiencia en la esfera pública como diputado provincial y concejal en el Ayuntamiento de Huesca durante los primeros años de la democracia, viajero, escritor y editor, pero por encima de todo fotógrafo.

Sus fotografías llegaron a ilustrar los primeros años de las campañas La Magia de Huesca y, en su conjunto, el archivo versa sobre paisajes, pueblos, arquitectura etnografía, fauna o flora de la provincia Huesca, centrándose principalmente en el Pirineo, en zonas como el Serrablo, la Hoya de Huesca, los Monegros o la zona de las sierras exteriores, de forma más residual hay otras de Teruel y del Moncayo. Imágenes que son testimonio de los cambios paisajísticos, sociales y culturales desde la década de los setenta hasta el siglo XXI.