Cultura

FOTOGRAFÍA

La artista Mapi Rivera regresa a Ámsterdam con "Amniosis"

La reconocida fotógrafa oscense inaugura este sábado en Holanda una colección de imágenes centradas en el origen de la vida a través del cuerpo humano y el agua

La artista Mapi Rivera regresa a Ámsterdam con "Amniosis"
La artista Mapi Rivera regresa a Ámsterdam con "Amniosis"
S.E.

HUESCA.- La obra de la artista internacional de origen oscense Mapi Rivera regresa a la Galería Art Singel 100 de Ámsterdam, este mes de marzo, al inaugurar este sábado Amniosis.

Hasta el domingo 31 de marzo se mostrará esta serie completa de fotografías centradas en el cuerpo humano desnudo y el agua como parte del mismo, ya que como recuerda su autora, nuestro cuerpo está compuesto de un 70% de agua, por lo que "somos seres líquidos contenidos por una aparente consistencia". Y esa es precisamente la premisa que puso en marcha esta colección.

Un sueño de Rivera es el origen de este trabajo, que viaja por primera vez a Holanda, después de que se inaugurase en la Lonja de Zaragoza, aunque como novedad en esta ocasión se ampliará la serie fotográfica con un repertorio de dibujos, "más bien apuntes o bocetos intuitivos" que son el origen de la elaboración de los trabajos de la autora.

Explica la artista que siempre surgen ideas, que hay que estar en constante inspiración, y que, precisamente, en este caso, fue un sueño sencillo, "pero muy vívido", en el que "vi un cuenco lleno de agua sobre el que caía una gota con un ritmo constante y me di cuenta de que en realidad, ese recipiente de agua era yo misma y la gota que caía era el aliento que me mantenía viva". Además, continúa, "sentí que, si bien el recipiente me contenía y diferenciaba, mi esencia era totalmente fluida".

De esta manera, se propuso reflejarlo en fotografías y, como si fuera una ecografía fetal, muestra la "levitación" del cuerpo como una unión completa entre éste y el líquido que lo rodea. Es decir, a través de veintidós imágenes "de agua sobre agua y burbujas que alientan la vida" la artista regresa a la "matriz primigenia" y se sumerge en el fondo del Mediterráneo, concretamente en una zona rocosa de Menorca extremadamente limpia, ya que de otra manera no habría sido posible lograr el resultado final, para representar el origen de la vida.

Desvela Rivera que el tema de este proyecto está vinculado a las letras hebreas que "tienen cuerpo, alma y espíritu". Se cree, explica la autora, que es un alfabeto sagrado del que brota el Universo. Por tanto, "estas veintidós letras son fuerzas espirituales que silenciosamente ocultan el secreto de la creación"; es por ello que "las pronuncio con su cuerpo -argumenta-, vivificándolas" y a cambio, "ellas me dan su aliento, su soplo, su espíritu".

Actualmente, Rivera ya está pensando y trabajando en otra idea, Eufonías. Un proyecto fotográfico que continúa su línea creativa, en la que el cuerpo de la autora interactúa con entornos naturales.