Las dos pasiones de José Luis Fortuño, la fotografía y la cultura ártica

HUESCA.- José Luis Fortuño Cored nació en 1954 en la calle Ramiro El Monje ("La Correría"), de Huesca. En los últimos 14 años, sobre todo, ha ido tras las auroras boreales, siempre con una cámara fotográfica al cuello. La fotografía y la cultura ártica son sus dos pasiones.

Su infancia fue "superbonita, una de las etapas mejores de mi vida. Vivía en el centro de Huesca y jugábamos en la calle con otros chicos a chapas, pitos y cosas de estas, y tuve una familia que se juntaba siempre en las festividades". "He tenido mucha suerte -añade-, he hecho de todo, he trabajado en lo que he querido, me han pagado por ello y estoy encantado".

Recuerda que tuvo su primera cámara fotográfica "reuniendo envoltorios de chocolate La Campana, de Elgorriaga", y que hizo de la fotografía su profesión "haciendo cursos por un tubo, en muchos sitios". "En mi profesión, tenemos que estar constantemente renovándonos; antes éramos fotógrafos, y ahora tenemos que ser fotógrafos e informáticos. Además, a mí siempre me ha interesado mucho la formación".

José Luis, uno de los fundadores, hace 29 años, de la Asociación Fotográfica Oscense (Afo-to), se define como un hombre "muy creativo" y de la fotografía resalta que es captar un momento y ver algo donde los otros no ven. En fotografía hay que tener dos conceptos muy importantes: la creatividad y el poder de observación. En muchas ocasiones pasamos por la vida pero no observamos, vemos pero sin observar, y a mí me interesa ver pequeños detalles".

Concentra su creación artística en la fotografía y en la pintura, pero "me gusta mucho la cultura en general, soy muy cultureta". Y sobre todo le gusta viajar, "porque las culturas diferentes me enriquecen mucho".

Desde hace 14 años estudia y fotografía las auroras boreales. "Me gusta el mundo ártico, todo lo que hay frío, nieve, etcétera. Los samis (esquimales), dicen que al que ve una aurora boreal, su vida cambiará para siempre, y a mí me cambió la vida porque desde entonces voy a Finlandia, Groenlandia, Noruega... a fotografiar auroras boreales, en los últimos años con viajes organizados con una agencia finlandesa".

El coronavirus le ha obligado a suspender muchos viajes, aunque ya tiene en cartera uno "a las islas Svalbard, a ver si consigo fotografiar un oso polar con un fondo de aurora boreal". Svalbard es un buen sitio para cumplir este sueño, ya que en este archipiélago "hay 3.500 osos censados y 2.800 personas".

Las medidas anticovid, además, "me hacen sentir un poco encerrado aquí, en Huesca, una ciudad que está muy parada, que se ha quedado muy atrás en muchas cosas, mientras Teruel nos está pasando por encima en lo cultural, comercia... Y me entristece que no hayamos podido celebrar el ascenso del Huesca, las fiestas de San Lorenzo... Y me pone de los nervios la poca responsabilidad de aquellos que no saben o no entienden lo que está pasando, o no quieren entenderlo".