Cultura

AÑO GOYA

Goya y Acín, protagonizan una nueva exposición en el Museo de Huesca

Los nexos entre ambos artistas, la tauromaquia y el afán por adelantarse a su tiempo

HUESCA.- El Museo de Huesca participa en la celebración del Año Goya por el 275 aniversario de la muerte del pintor con un proyecto expositivo inédito que trata de poner en valor los puntos de contacto entre los artistas Ramón Acín y Francisco de Goya. “Ramón Acín y Goya. Dos artistas más allá de su tiempo” es el título de la muestra que el director general de Cultura del Gobierno de Aragón, Víctor Lucea, ha presnetado este viernes, junto al director del Museo de Huesca, Fernando Sarria, la directora provincial de Educación Olga Alastruey y la jefa de Servicio de Difusión del Patrimonio Cultural, Archivos, Museos y Bibliotecas, Laura Asín.

La nueva muestra, que se expone en las salas 7 y 8 de la pinacoteca oscense, con un aforo permitido del cincuenta por ciento de su capacidad total, parte de una serie de litografías de Goya, Los toros de Burdeos, que forma parte de la exposición permanente del museo, y continúa en la sala contigua con una serie de obras del oscense Ramón Acín en las que se ve su fuerte vínculo con el pintor de Fuendetodos. “Una relación muy afortunada entre los dos artísticas que se ha podido establecer gracias a los obras que dispone el Museo de Huesca” porque se ha creado a partir de fondos propios y gracias a la labor del personal de la galería, han destacado las autoridades presentes.

Uno de los grabados de Goya sobre la tauromaquia
Uno de los grabados de Goya sobre la tauromaquia
Pablo Segura

Durante la presentación de este proyecto, Lucea ha subrayado que “estamos en un momento importante del Museo de Huesca que realza la relación existente entre ambos artistas y lo hace sobre todo a través de tres ejes: la serie de la tauromaquia de Goya, que ya estaba en este museo de Huesca, de la cual parte la exposición, del material relacionado con los toros que Acín desarrolló en su vida artística y, además, los documentos y proyectos vinculados al importante papel que jugó Acín en el centenario de la muerte de Goya en 1928”.

Por otro lado, esta exhibición subraya el valor de ambos artistas “como adelantados a su tiempo, en propuestas y técnicas pictóricas y de mensajes” ha apuntado el director general de Cultura aragonés.

Por su parte, el director del Museo de Huesca, ha dicho que la exposición, "muestra la conexión entre ambos artistas aragoneses en el sentido de ser dos figuras que siempre propugnaron un avance en la modernidad, un desarrollo de nuevas vías de expresión artística”.

Sarria ha explicado, que “en el caso de Goya, la aportación a esta exposición son la serie de litografías de Los toros de Burdeos, en las que se aprecia un Goya octogenario cercano a la muerte, que desarrolla procedimientos muy novedosos en la época y en las que aparece ese símil suyo de una figura anciana, alargada, con la leyenda del famoso aún aprendo. Ese Goya que siempre está con esas inquietudes de carácter artístico. Inquietudes que también acompañan a la otra figura, Ramón Acín” al que ha destacado como “artista polifacético donde los haya” por su labor como grabador, dibujante, pintor, publicista, pedagogo, escultor, “un artista con verdadera vocación de aprendizaje universal y de explorar las líneas de novedad artística”.

Además, ha revelado Sarria que “en la figura de Acín vemos esos ecos goyescos como fue su participación en el centenario del nacimiento de Goya en 1928” y explicó que quienes visiten este nuevo recorrido podrán conocer el manifiesto de Acín, el cartel de la exposición que el oscense llevó a cabo en el Rincón de Goya, de Zaragoza, “en un edificio novedoso, de arquitectura racionalista, que fue muy criticado y donde hay una encendida defensa por parte de Acín de este tipo de novedad artística y, además, demuestra que quiere exponer en ese edificio y lo dice en su escrito en homenaje a Goya”, ha apuntado.

Ha hecho hincapié en otro tipo de dibujos goyescos que se ven en la sala como una Maja o el retrato que le hace a Goya aprovechando los rasgos fisionómicos del primo de su mujer, en este sentido, indicó que “se ha sacado las dos obras para que se vea esa inspiración, que es algo habitual en el mundo del arte, ya desde la Edad Media”.

Y como ya adelantaba el inicio de la exposición “vemos un nexo de unión entre ambos artistas a través de la tauromaquia”. En este aspecto, ha profundizado Sarria en las litografías de Los toros de Burdeos en las que “advertimos la dualidad de visión sobre el mundo taurino, un espectáculo cruento pero Goya también sabe sacar enseñanzas de carácter plástico de él y crear obras en las que se aprecia belleza”. Por su parte, en el arte de Acín ocurre lo mismo, ha corroborado el director del Museo de Huesca, “por un lado hay una visión satírico- cómica con su obra visionaria Las corridas de toros en 1970”, editada en 1923, que con ocasión de esta muestra, proyecta la pinacoteca en la versión de Emilio Casanova que en 1988 realizó un cortometraje audiovisual, de casi nueve minutos, basado en la serie de 32 dibujos del libro de Acín que trata de ser fiel a los originales del artista oscense. Se ha instalado una televisión junto al libro del oscense y a varias muestras de los dibujos que ya entonces proyectaba utilizando una linterna mágica y una sábana. 

Ha advertido el director del museo que “también se refleja una visión mucho más artística en el sentido de reivindicación de los valores plásticos de esa fiesta del toreo y hay una serie de obras de Acín donde se muestra la plasticidad en el mundo taurino y alguna curiosidad que hemos rescatado del archivo como en la que se ve al propio Acín con traje de picador donde lo más curioso es que varean la imagen más conocida de Ramón Acín en Huesca que son las pajaritas”.