PERFIERIAS
“La música de Dedito Finger es sencilla y no se toma muy en serio”
El oscense Chalo Moca presenta por primera vez en directo su nuevo proyecto musical
El festival Periferias se viste este sábado de largo para asistir a la presentación de un nuevo proyecto musical: Dedito Finger, una propuesta de soul neo-punk de la pradera sideral creada por el oscense Chalo Moca.
“Voy con muchas ganas. Es un proyecto al que llevo dándole vueltas casi cinco años, así que me hace muchísima ilusión parirlo al fin”, afirma el cantante.
Esta propuesta nace a partir de dos cuerdas de bajo que el artista tocaba (y toca) de manera algo primitiva con un dedo. Por eso escogió una denominación tan peculiar y llamativa como Dedito Finger.
“Me gusta el nombre porque tiene un toque de humor y es polisémico. Un dedito puede servir para dar placer, pero también para hacer daño. Lo utilizamos para señalar, para indicar, así como para escarbar. Lo podemos utilizar para insultar (hacer una peineta) y realizar diferentes símbolos y señales. Además, cuando a alguien le favorecen, le enchufan, se dice que lo han puesto a dedo. ¿Quién no conoce a un enchufado?”, argumenta.
Además de por su labor pictórica, desarrollada en solitario y con el dúo creativo Fratelli Moca -junto a su hermano Alva Moca, que precisamente expone en esta edición de Periferias-, el cantante también es conocido por haber militado en la banda Licor de Pájaro, en la que derrochaba carisma por los cuatro costados.
“Aunque tienen puntos de convergencia, Dedito Finger es mucho más crudo y directo. Es una música sencilla, que tiende al baile y que no se toma demasiado en serio. Licor de Pájaro era bastante más elaborado y complejo”, señala.
El primer adelanto de este nuevo proyecto se llama Lobo, toda una declaración de independencia llena de aullidos y psicodelia. En junio llegará el segundo, Culebra no engancha a culebra, que también contará con su respectivo videoclip.
“La idea es ir sacando temas. Aunque tengo material de sobra, de momento no me planteo grabar un EP o LP”, confiesa Moca, consciente de cómo funciona la industria en la actualidad: “Creo que el paradigma ha cambiado y ahora mismo es más dinámico y natural ir compartiendo canciones cada poquito, que grabar un disco y no sacar nada nuevo en dos años”.
En estos momentos pandémicos que vivimos, “asistir a un concierto para ver y escuchar a músicos en directo es ya de por sí bastante sorprendente”, bromea el cantante, que este sábado noche intentará conquistar al público oscense con la inestimable ayuda de Javier Bergua (batería), Fernando Tresaco (guitarra) y Kike Escartín (teclado).
Será, a las 21:30 horas, en el Auditorio Carlos Saura del Palacio de Congresos de Huesca, en el marco de un festival al que quiere y respeta.
“Siempre es bonito que en tu casa te valoren. Está muy bien (y es necesario) que se faciliten espacios/eventos para que los músicos y artistas locales se desarrollen. Aunque por desgracia es un festival, que como todo lo cultural, ha ido sufriendo recortes continuos en el presupuesto, siendo un ejemplo más de la precarización de este sector”, sentencia Chalo Moca.
Más música
La jornada musical arrancará a las 19 horas, en el Centro Cultural Manuel Benito Moliner, con los conciertos de Azu Tiwaline & Cinna Peyghamy y Emmanuelle Parrenin & Detlef Weinrich.
El primero de estos dúos presentará el aclamado álbum Draw me a silence, que está inspirado en un nuevo hogar en el desierto.
Por su parte, la cantante folk francesa Emmanuelle Parrenin y el músico electro alemán Detlef Weinrich tocarán en directo Jours de grève, un disco en el que combinan el gusto por la aventura y el sentido de pureza.
Ya en el Palacio de Congresos, tras Dedito Finger, Víctor Coyote presentará Las comarcales, un disco que sigue la estela personal del que fuera líder de Los Coyotes, alejado de las principales “carreteras” musicales, algo que no deja de aportar una amplia riqueza a su música tanto rítmica como poética.
