Cultura

LA ENTREVISTA

Monika Zgustová: “Ahora nadie quiere a los refugiados, estamos en un claro retroceso”

La escritora habló este martes en Huesca de sus personajes femeninos, la memoria y el exilio

Monika Zgustová.
Monika Zgustová.
Pablo Segura

La escritora y traductora checo-española Monika Zgustová (Praga, 1957) participó este martes, en Huesca, en un encuentro con el editor Alfonso Castán que se centró en los personajes femeninos en su obra, acto organizado por Librería Anónima y Editorial Contraseña. Protagonistas inventadas y muchas otras, mujeres que realmente vivieron, como la hija de Stalin, Svetlana (personaje central de Las rosas de Stalin) o las mujeres del Gulag (protagonistas de la novela Vestidas para un baile en la nieve).

Entre las primeras, destacó a Silva, la protagonista de La mujer silenciosa, “una mujer que vivió a lo largo de todo el siglo XX, con todas las guerras, las posguerras y los distintos totalitarismos, ideologías, y la dificultad de tomar decisiones en un régimen totalitario. En una democracia, la decisión que tomas generalmente la puedes corregir si no es correcta, pero en un totalitarismo, si tú tomas una decisión, te puede marcar para siempre”.

Reconoció Zgustová que para ella no es difícil escribir sobre mujeres, “porque como mujer las entiendo y es un terreno que conozco mejor que el de los hombres”.

Asimismo, explicó que generalmente escribe sobre el siglo XX y la Europa del Este, “que es algo que yo he vivido y que conozco bien y tengo cosas por decir”. Pero también lleva a sus libros “la memoria histórica, basándome en la colectiva de mi país de origen o de los países del Este en general, pero también de la memoria de mi familia o mis amigos, lo que ellos me contaron sobre sus vivencias”.

En declaraciones a este Diario, comentó que trabaja en dos novelas “inventadas, pero básicamente hablarán del exilio de un régimen totalitario a la democracia y todas sus dificultades, y de las difíciles relaciones en la familia, sobre todo entre madre e hija”.

En cuanto a los que actualmente buscan refugio en otro país, Zgustová afirmó que “ahora lo tienen mucho más difícil que en la época en que se refugió mi familia, porque entonces hubo más ayuda. Siempre es un tema muy difícil, pero al menos en aquella época hubo más ayudas, que ahora, realmente, nadie quiere a los refugiados. Estamos en un claro retroceso y la UE, al menos, debería replantearse su política con los refugiados”.