Mariano Lasheras: “Es una oportunidad para contar qué es el salvaje y su significado”

La actividad Nosotros, los salvatges ¿Quiénes somos, de dónde venimos, dónde vamos? sustituirá, este sábado, la representación del Ball dels Salvatges, una fiesta de Interés Turístico de Aragón basada en una tradición folclórica local de varios siglos inspirada en la figura del Salvaje, un mito nacido en Grecia y con gran auge en la Europa medieval. El actor Mariano Lasheras (Zootropo Teatro), responsable de esta actividad prevista en el castillo de Benabarre en tres pases, lideró el equipo que recuperó el Ball dels Salvatges en 2007, a instancias del Ayuntamiento.

“Se explicará el origen de este peculiar personaje, su importancia en la historia, el arte y la literatura y su vinculación con Benabarre”, donde se presentó este Ball dels Salvatges desde el siglo XIV y hasta 1912, con una única representación posterior, de forma parcial, en el año 1956. “El Ball dels Salvatges aúna danza, teatro y música y su gran atractivo es que es una fiesta que, durante siglos, se desarrolló por toda Europa y, de repente, se pierde y solo Benabarre la mantiene hasta entrado el siglo XX”.

Lasheras encabezó el equipo multidisciplinar que, entre 2006 y 2007, se encargó de la recuperación. El etnólogo y folclorista Joan Amades había recopilado, a principios del siglo XX, las melodías del Ball dels Salvatges que muchos grupos las interpretaban sin saber su origen. Junto a Lasheras, trabajaron el antropólogo Manuel Benito, Roberto Serrano, en el apartado musical, y Jesús Rubio, experto en danzas tradicionales.

El resultado fue una representación con más de un centenar de personas celebrada anualmente del 2007 al 2010 y, desde entonces, de forma bianual hasta la pandemia. “Nos planteamos esperar al 2022, cumpliendo el proceso bianual, así que este año hemos tenido la oportunidad para contar qué es el salvaje y su significado”.

Lasheras se remonta al mito del salvaje griego para definir esta figura. “El salvaje es el otro yo. Naturaleza frente civilización, lujuria frente amor casto”.

A partir de la Edad Media, el salvaje empieza a aparecer en el carnaval. “En Aragón, se ha conservado el Carnaval de Bielsa, cuyos personajes son salvajes. También en Aragón, se conservan muchas leyendas asociadas a estos seres como el ‘Ome Onso’, ‘Silván’ o los ‘Omes Grandizos’. Son gigantes relacionados con los cíclopes griegos”.

En la tradición medieval europea, el salvaje se cazaba de forma simbólica para atrapar la fertilidad en primavera. También había cómicos “salvajes” que recorrían las poblaciones. “En el banquete de coronación de Martín I El Humano actuaron varios salvajes”, asegura.

“El salvaje era importante porque daba temor”, añade, aludiendo a su inclusión como imagen esculpida en escudos y palacios, y “la religión cristiana lo adopta con los primeros anacoretas”, prosigue. En los cuentos infantiles, concluye, enfrentarse a los “salvajes” de los bosques marca la transición a la madurez.