Sabiñánigo trae al siglo XXI la protección en la vida tradicional

Las Jornadas de Patrimonio de Sabiñánigo giran este año en torno a los elementos mágicos y de protección en la cultura tradicional.

La programación cultural del Ayuntamiento incluye desde hace algunos años y con carácter de bienal este evento en el que se analizan diferentes aspectos del patrimonio natural, cultural, material o inmaterial.

Desde este miércoles y hasta el 30 de septiembre, bajo el título Elementos y espacios sagrados. La protección en la vida tradicional, en esta jornadas se analizan distintos elementos de protección individuales y colectivos, a veces relacionados con lo sagrado y otras con ritos precristianos o creencias milenarias que se enlazan con el razonamiento mágico.

“Aparentemente puede parecer un tema poco profundo, sin embargo, está muy ligado incluso a nuestro propio desarrollo personal. El razonamiento mágico está presente en nuestra infancia y también en la sociedad desde sus inicios. Siempre hemos buscado protección bien a través de la religión o de la superstición, generando a su alrededor ritos y creencias en torno a las que se ha articulado el modo de vida de cada época y muchas de estas creencias han llegado hasta nosotros estaban muy vivas en la vida tradicional”, apunta la alcaldesa y concejala de Cultura, Berta Fernández.

Este evento ofrece un variado programa dirigido a público de todas las edades. Este miércoles se abrió la exposición Cuando las piedras hablan. Simbología pirenaica, de José Miguel Navarro y Merche Pérez, que realizaron una visita guiada analizando la simbología presente en el Pirineo, muchas veces en las casas y generalmente con fines protectores.

Este jueves será José Miguel Navarro quien tome la palabra en una conferencia titulada Santos, culebras y piedras. La magia en la medicina popular, donde hablará de medicina tradicional, en la que la observación de la naturaleza y los tratamientos que tienen una explicación racional se mezclaban con las creencias puramente mágicas. En este sentido, indica Berta Fernández que es importante reseñar que el Museo Ángel Orensanz “dispone de una sala dedicada a la medicina popular, diseñada en su momento por José Miguel Navarro, en la que se pueden contemplar algunas piezas ligadas a este tema”.

Este viernes llegará el turno a los cuentos y leyendas, con la representación de A las doce en el Serrablo, cantan las brujas y el diablo, por parte de Mariano Lasheras, acompañado por Pilar Gonzalvo. Se trata de un espectáculo dirigido a público familiar en el que los mitos, las leyendas y los cuentos de nuestro entorno serán los protagonistas. “Desde sus inicios, la humanidad contó historias que se fueron adaptando a lo largo de los siglos, constituyendo un rico patrimonio inmaterial que ha llegado a nuestros días, pero cuyas raíces aparecen en tiempos muy remotos y en cuyos contenidos la realidad y la magia se entrelazan, al igual que en los relatos de los niños, siendo quizás esta la explicación de su permanencia en el tiempo”, reflexiona Fernández.

Este martes se proyectará el documental de Eugenio Monesma Creencias y religiosidad popular, en el que se analizan los distintos elementos protectores a nivel individual, para la casa o para la colectividad.

El miércoles 29, serán Antón Castro y Eduardo Viñuales quienes en su charla guiarán al público por distintos caminos y entornos mágicos del Alto Aragón, proponiendo recorridos y visitas en las que la magia presente en nuestra antigua cultura se mantiene actualmente.

Estas jornadas finalizarán el jueves 30 con la conferencia de Enrique Satué El reparto espacial de lo sagrado en la sociedad tradicional de Serrablo, en la que de forma pormenorizada se analizará la religiosidad popular de Serrablo.

Para participar en cualquiera de estos actos que componen el programa, es necesario inscribirse en el Molino Periel, bien presencialmente o llamando al 974 48 42 50 (de lunes a viernes). “Se trata de un interesante y ameno programa, con el que intentamos preservar del olvido algunos de los elementos más importantes de nuestra cultura popular”, asegura Fernández.