Cultura

LA ENTREVISTA

Isabel Alonso: “Mi paso por el feminismo me hizo ver que lo personal es político también”

La historiadora presenta este martes (19 horas) en Huesca su primera novela, Como un pulso

Isabel Alonso
Isabel Alonso
S.E.

La profesora de Historia Isabel Alonso Dávila presenta este martes por la  tarde, a partir de las 19 horas, en el Espacio Rosa Luxemburgo de Huesca su primera novela, Como un pulso, de la editorial Caligrama, en un acto organizado por el grupo Historiahuesca, integrado por una decena de personas interesadas en la investigación histórica y en fomentar el conocimiento y el debate ciudadano, en el que estará acompañada por el historiador Juan Mainer.

Se trata de una novela que baila entre el género policiaco, el compromiso político y los conflictos familiares, explica la escritora, y añaden desde la organización del acto literario que es “en buena medida un ejercicio de autoficción en el que la propia autora construye un relato, a partir de hechos autobiográficos, acerca de los últimos años del franquismo y de la llamada transición democrática”.

En este sentido, Alonso ha desarrollado una novela histórica de ficción en la que entrelaza lo público y lo privado. La divide en tres partes, la primera sucede en Granada, en 1975, fechas en las que, indica la autora, “fue la última vez que pasé por la cárcel, me detuvieron el 10 de octubre y salí en libertad provisional siete días antes del fallecimiento del dictador”; la segunda parte sucede en Valencia y la tercera en Barcelona.

Lo que encuentra el lector “es una ficción basada en hechos reales sobre la lucha estudiantil antifranquista -añade la historiadora- que parte de la investigación de unos documentos de archivo reales y que están referidos a mí, a los que llegué por casualidad”, pero también bebe de los muchos recuerdos que tiene Alonso y de la ficción a nivel personal, insiste, “puesto que mi paso por el feminismo me hizo ver que también lo personal es político”. En este sentido, desvela que “la novela no habla solo de detenciones e interrogatorios sino que narra también la vida personal de lo que suponía vivir en una familia en dictadura donde solo podían hablar los que estaba a favor del régimen y, si había detenciones, eso ya era una ruptura familiar gravísima”. Y es que descubre que “lo más duro es el desgarro familiar”.

Confiesa Alonso que no se había planteado una novela hasta que, tras pasar por un curso de escritura, la animó una profesora.