Cultura

PRESENTACIÓN LITERARIA

‘Pellem’, otra forma de vivir la actitud de los sentidos

Fran Picón presenta en la Durán Gudiol de Huesca su último poemario

Angélica Morales, Fran Picón y Belén Mateos, en la presentación de Pellem.
Angélica Morales, Fran Picón y Belén Mateos, en la presentación de Pellem.
Pablo Segura

Los versos de Pellem llevan a vivir de un modo diferente la actitud de los sentidos tal y como quedó reflejado este jueves en la presentación en Huesca de este poemario de Fran Picón, que inauguró las actividades del club de lectura de poesía de las bibliotecas municipales que coordina Angélica Morales, que presentó el acto en el que también participó Belén Mateos, poeta y narradora que firma el prólogo que acompaña a esta obra.

La Biblioteca Durán Gudiol acogió el encuentro con el poeta zaragozano, que compartió con los lectores los entresijos de Pellem (in deversorium sensuum) (Lastura ediciones), “un único poema, fragmentado en forma de pequeños poemitas, que cuenta, no de una forma literal, una historia de amor real. Hay mucho de biográfico y una parte de literatura en este poemario”, confesó a este diario.

Como reconoció Picón, una gran parte de la poesía en general, y de la suya en particular, “es sensitiva, es emoción. La magia de un poema está en provocar una emoción en el lector, que no tiene por qué coincidir con la idea primigenia del autor”.

La poesía de Fran Picón habla desde los sentidos “de forma habitual”, pero también tiene una parte de poemas con marcado sentido social “porque pienso que el poeta, el escritor, debe estar comprometido con su tiempo y con su entorno”.

En Pellem, el autor reivindica el tacto, el florecimiento de las emociones y de lo sensorial, la pasión y la sexualidad sin rodeos. Se trata de una pulsión por lo erótico que nace del hecho de que “somos seres de contacto, de roce; sentir es vivir. El erotismo es algo consustancial al ser humano y, por eso mismo, es parte importante de la creación artística en general, y de la poesía en particular”, reconoció Picón, para quien la belleza, los sentidos, las sensaciones y emociones “conforman un mundo maravillo al que la poesía no puede, y no debe, ser ajeno”.

A juicio del escritor, “el poema es un desnudo más integral que el desnudo físico; es un acto de introspección, de privacidad en el momento de escribirlo, que se hace público al exponerlo a los potenciales lectores”.

Fran Picón se define como “una persona de piel, de roce, de contacto; una persona que, tanto en la vida personal como en la faceta literaria, se deja tutorar por los sentidos, incluso más que por la razón”, y para él el amor es el leitmotiv de la vida, en todas y cada una de sus facetas y formas, incluida el desamor”. De hecho, no escribe normalmente cuando está “feliz, bien, contento, disfrutando, pero sí que cuando esas situaciones no se dan me vuelco en la poesía como forma de expresión de mis emociones e, incluso, como terapia”, aseguró.

Por eso, en Pellem no deja lugar para el pudor o la timidez. “Es mi libro más desgarradoramente biográfico y personal”. Para Angélica Morales es “un libro de gran belleza, muy sensual e intimista”, en el que Picón ensalzan ese erotismo, que más en la literatura, “busca alcanzar la cima de lo no cuantificable. Somos seres de contacto, de abrazarnos, de besarnos, de sentirnos, y eso tiene mucho que ver con el erotismo”, insistió el autor, para quien “la literatura es, y debe ser, parte esencial de la realidad en la que nos movemos y, en nuestra realidad, el erotismo tiene un lugar imprescindible en esa maravillosa aventura que es sentirnos vivos”.