Cultura

ENTREVISTA

Gregorio Hierro: “Hay una serie de funciones que podemos desempeñar los laicos”

El delegado Episcopal de Ecumenismo de la Diócesis de Zaragoza visita Sabiñánigo

Gregorio Hierro.
Gregorio Hierro.
M. P.

Gregorio Hierro, delegado Episcopal de Ecumenismo y diálogo interreligioso de la Diócesis de Zaragoza, ha estado en la clausura del taller de ecumenismo organizado por el Equipo Ecuménico Sabiñánigo. Es la primera vez que la Diócesis de Zaragoza tiene un laico en este servicio, “pero más de la mitad de las delegaciones episcopales de esta Diócesis -explica- están ocupadas por laicos y muchas de ellas por mujeres. Poco a poco, en la iglesia se va viendo que hay una serie de funciones que podemos desempeñar perfectamente los laicos”.

En cuanto al ecumenismo, dice que el problema en la sociedad no es que cale o deje de calar, “es que ni siquiera llega a conciencia ni de ecumenismo. Mucha gente desconoce el termino y lo que estamos haciendo. Es cierto que ahora el hecho religioso en la sociedad no tiene la importancia que tuvo hace años y hay grandes sectores de la sociedad que están alejados de la religión. Para esos sectores, el que cristianos de distintas confesiones hablemos o dejemos de hablar no tiene excesiva importancia. Dentro de las propias confesiones, sí hay personas que ven esa necesidad de avanzar en hacer cosas juntos”.

Y aquí nombra la labor que lleva a cabo el Equipo Ecuménico Sabiñánigo, “un modelo para muchas Diócesis”. En este sentido, argumenta que hay gente de las diferentes confesiones “que empieza a entender, por ejemplo, que la atención al desfavorecido no es un problema de católicos o protestantes, es un problema de cristianos y como tales tendríamos que asumirlos”.

Para Gregorio Hierro lo primero que tendrían que hacer todas las confesiones comprometidas con el ecumenismo “sería cuidar más la formación de nuestros fieles, de las personas creyentes de cada una de esas confesiones. Soy consciente que dentro de la propia iglesia muchos feligreses que participan en diversos servicios, el ecumenismo no lo entienden, y ahí tenemos mucho trabajo, creo que habría que empezar por ahí, por los de casa”.

E incide en que cada confesión comprometida con el ecumenismo “tendría que empezar por concienciar a su comunidad, a sus comunidades, y a partir de ahí pueden funcionar muchas cosas”, concluye.