Cultura

MÚSICA

Alejandro Esperanza: "Los olivos son un símbolo de la cultura con la que me identifico"

dedica a estos árboles el título de su segundo disco. Manel Fortià y Marcelo Woloski acompañan al pianista oscense en el LP

Alejandro Esperanza.
Alejandro Esperanza.
S.E.

Alejandro Esperanza (Huesca, 1992) creció en el barrio oscense conocido popularmente como Los Olivos, en cuyos árboles jugó durante toda su infancia. Por eso, no es de extrañar que haya escogido esta denominación para titular su segundo disco, Olivos, que se puede escuchar desde hoy en todas las plataformas digitales.

“Los olivos también son para mí el símbolo del Mediterráneo y de la cultura con la que me identifico”, explica el pianista, que ha creado un álbum con “mucha sensibilidad”.

En este LP le acompañan Manel Fortià, “uno de los contrabajistas más solicitados del mundo” que ha colaborado con Chano Domínguez, Dave Liebman o Eliot Zigmund; y Marcelo Woloski, un “multiinstrumentista ganador de dos Grammy Latinos con la banda Snarky Puppy”, destaca.

“Ha sido muy fácil trabajar con ellos. Es un honor contar con semejantes artistas, y más, para grabar mi propia música. Creo que la decisión de escogerlos a ellos fue clave. Estoy muy orgulloso del resultado”, confirma.

El trío presenta una música “con un pianismo delicado y profundo, con melodías y atmósferas conmovedoras”, que aportan una “gran calidez” debido a que “todos los instrumentos son acústicos”, dice.

Los recursos de Manel en el contrabajo y sobre todo, Marcelo con sus percusiones, hacen que la música esté llena de colores. Encuentro que es muy agradable de escuchar”, opina Esperanza.

Además de jazz, en Olivos aparecen influencias de compositores como Debussy o Brahms, visibles en las seis canciones originales del álbum, que se completa con una versión del In my life de los Beatles y otra del standard Skylark.

El parón producido por la pandemia permitió al oscense concentrar su energía en preparar sus actuales proyectos. “Por un lado, la elaboración de este disco y por otro, el espectáculo Blanco y verde junto con el bailarín Pablo Pérez Alonso”, confiesa.

El “proceso creativo necesita espacio y tiempo” y, afortunadamente, durante este año y medio ha podido tenerlo. “Soy de los que piensan que la inspiración te pilla trabajando”, comenta.

El disco fue masterizado por Jeremy Loucas en el Sear Sound Studio, un recinto que han pisado figuras tan importantes como John Lennon, David Bowie, Eric Clapton o Norah Jones.

“Trabajar allí con él fue un privilegio. Estuve en Nueva York en agosto, cerrando los últimos retoques. Es un lugar de referencia donde han trabajado los mejores músicos, no solo de jazz, sino de todos los estilos”, valora.

Por otro lado, la portada y contraportada del disco brillan gracias a dos pinturas que encargó al artista Ramón Moscardó, donde los olivos y los integrantes del trío son los principales protagonistas.

“Ramón es un pintor que conocí en Cadaqués y me quedé enamorado de su estilo. Me parece insuperable. Entendió perfectamente mi mensaje y me encanta el detalle de los olivos saliendo del piano”, enfatiza, antes de añadir que del diseño gráfico se ha encargado el ilustrador vasco Arkaitz del Río.

El disco físico se puede comprar a través de su página web, www.alejandroesperanza.com. “Ahora que viene la Navidad, siempre es una buena opción regalar música”, aconseja.

Conciertos

Últimamente, Alejandro Esperanza ha estado “muy centrado” en un encargo del Festival de Jazz de Barcelona para un concierto homenaje al pianista Tete Montoliu, por lo que la presentación en directo de su disco en Huesca tendrá que esperar.

“De momento, solo lo he tocado el pasado 26 de noviembre dentro del Festival de Jazz de Zaragoza y fue todo un éxito”, celebra.

Espero poder hacerlo en la provincia de Huesca durante el 2023. Tengo muchas ganas de compartirlo con el público”, remata.