Música y solidaridad para ayudar al pequeño Dídac
La Orquesta Atenea y Ery Praderas actúan hoy en el antiguo Matadero
La Orquesta de Pulso y Púa ‘Atenea’ ofrece hoy (19:00 horas) su Concierto de Reyes con fines solidarios en el Centro Cultural Manuel Benito Moliner de Huesca, donde contarán con una invitada muy especial; Ery Praderas.
El dinero que se recaude con las entradas, que tienen un precio de 3 euros, se destinará a la Asociación No Soy de Piedra, concretamente para ayudar a Dídac, un niño de dos años que padece el síndrome del hombre de piedra-heteroplasia ósea progresiva, una enfermedad rara diagnosticada a tres menores en nuestro país.
“Lo importante no es solamente el dinero, sino la visibilidad. Gracias a conciertos como este mucha gente puede conocer esta patología e incluso algún investigador se puede poner en contacto con ellos. La sociedad tiene que saber que existe”, asegura Noemí Lanaspa en representación de la Orquesta.
El formato de la actuación “se quedó en el tintero en vísperas de la pandemia”, por lo que ahora es un “muy buen momento para recuperarlo”, destaca.
El público que acuda al antiguo Matadero podrá disfrutar de varias piezas instrumentales interpretadas en directo por 19 músicos, que tocarán “desde composiciones latinas hasta temas de algunas bandas sonoras”, comenta Lanaspa.
“Creemos que lo que hemos preparado puede sorprender y gustar al público”, desea la oscense.
Ery Praderas
En cinco de las canciones que interpretará la Orquesta de Pulso y Púa ‘Atenea’ estará acompañada por la cantante Ery Praderas, muy querida entre el público oscense gracias a sus múltiples proyectos profesionales.
“Me siento muy agradecida con la orquesta por pensar en mí y darme la oportunidad de participar y colaborar en algo tan bonito como es la causa solidaria de este Concierto de Reyes”, destaca la vocalista.
Cuando Noemí Lanaspa se puso en contacto con ella y le planteó esta posibilidad no dudó “ni un segundo en decirle que sí”, porque: “¿Cómo me iba a negar a participar en algo con tanto corazón?”.
“La música es mi pasión y soy afortunada por poder dedicarme profesionalmente a ello, y cuando puedes aportar tu pequeño granito de arena solidario con el amor por lo que haces, rodeada de gente que también lo hace con el mismo fin y el mismo cariño, todavía es más especial”, confiesa.
En esta línea, Praderas resalta que “es maravilloso aunar fuerzas en pro del bien ajeno”, ayudando “a colectivos que lo necesitan y mucho”, como es el caso de la Asociación No Soy de Piedra, que “lucha contra enfermedades tan injustas como raras, como la que tiene el pequeño Dídac”.
“Será precioso si este 7 de enero somos capaces a través de nuestra música y llenando el Centro Cultural de dibujarle una bonita sonrisa entre todos”, remata
