Cultura

XXI CERTAMEN DE TEATRO PEDRO SAPUTO

‘La bella Dorotea’, un drama trágico revestido de humor

Kairós Teatro regresa este sábado a las 19:00 horas al Centro Cultural de Almudévar con su último montaje, un texto de Miguel Mihura

Kairos Teatro sube mañana a las tablas en Almudévar, La bella Dorotea.
Kairos Teatro sube este sábado a las tablas en Almudévar, La bella Dorotea.
A.T.S.

El Centro Cultural de Almudévar “cambiará” este sábado a partir de las 19:00 horas su fisonomía y mostrará un retrato de la sociedad española de principio del siglo XX con La bella Dorotea, una obra en la que Miguel Mihura mezcla poesía y humor al tiempo que hace una feroz y divertida crítica a los chismorreos populares.

Kairós Teatro regresa con su nuevo montaje al Certamen Pedro Saputo, en el que ha puesto en escena sus seis últimos espectáculos, y al que llega con esta adaptación dirigida por Juan Ramón Benaque.

Ambientada a principios de 1900 en un pueblo del norte de España al que empezaban a llegar los veraneantes, Dorotea, hija del cacique local y una mujer que ha viajado y conoce otras formas de vida, vuelve a sufrir un fracaso amoroso. Cada vez que se enamora, la gente del pueblo comienza a difundir rumores de que el novio solo la quiere por su dinero, lo que provoca que el último de ellos, dolido, la deje plantada en el altar. Dorotea decide entonces salir a pasear todos los días vestida de novia, una nueva situación que critican y de la que se ríen todos los vecinos.

Como dicen desde Kairós Teatro, “cuando lo que la rodea es un mundo incomprensible y el único refugio de su existencia es un frágil abrigo expuesto a las inclemencias del amor, Dorotea se sumerge en una tormenta inquietante, brumosa al principio y tempestuosa después, que quiebra en ahogados sollozos las tensas cuerdas de un alma anhelante de cariño y comprensión”.

Se trata, explica Ana Más, presidenta de la Asociación Kairós Teatro y actriz que da vida a Dorotea, de “un drama trágico revestido de humor, como dice nuestro director, Juan Ramón Benaque”, una amarga comedia que entre risas y desasosiegos “nos presenta una realidad que anida en lo más intrincado de los bosques de nuestra conciencia”, reiteran desde la compañía.

Kairós ya llevó a escena otro título de Mihura, Maribel y la extraña familia, “y leyendo el guion de La bella Dorotea vimos que era una obra que tenía muchas posibilidades, pese a que no es fácil porque tiene mucho sentimiento”, comenta Ana Mas.

Les pareció atractiva y que se amoldaba al elenco de actores, por lo que decidieron “ponerla en marcha”, aunque el camino no fue fácil ya que tuvieron que parar por la pandemia. “Nos ha costado sacarla adelante porque programar los ensayos fue complicado. Durante un tiempo, una componente, Alicia Asín, se ofreció a sustituir al director, y guiada siempre por él pudimos retomarlos con mayor anticipación”. También tuvieron que afrontar dos sustituciones por temas de salud, “y eso también retrasó el estreno. Pero enfrentarnos a estas dificultades, por muy dolorosas que hayan sido, nos ha hecho estar más ilusionados con el estreno”, que tuvo lugar en noviembre en el Centro Cívico Sánchez Punter de Zaragoza. En enero estuvieron en Ariza y mañana harán su tercera función en Almudévar, una plaza que les ha dado muchas alegrías, con premios y nominaciones en ocasiones anteriores. Además, Mas destaca “la apuesta de este certamen por los grupos de teatro aficionado aragoneses”. “Nosotros -continúa- le estamos muy agradecidos y siempre que podemos y tenemos obra, participamos”, y este año no ha sido una excepción, “nos presentamos y hemos tenido la suerte de ser seleccionados”.

Acuden llenos “de ilusión” y dispuestos a disfrutar de una puesta en escena “con la que el público lo va a pasar bien”, y de la que en Kairós están “muy satisfechos porque, insisto, no nos ha resultado fácil. Cada vez hemos confiado más en ella, y al final estamos contentos con el resultado”, aunque saben que son los espectadores los que tienen la última palabra, y en el caso de Almudévar también el jurado.

Kairós comenzó su andadura en 2002 bajo el amparo de la Hermandad de Antiguos Empleados de Caja Inmaculada, “de la que hemos contado con el apoyo incondicional desde que empezamos, incluso durante la pandemia”, y la mayor parte de sus miembros son extrabajadores de CAI, familiares o amigos que disfrutan haciendo teatro.

En dos décadas hay mucho trabajo y oficio detrás por parte de todos los miembros Kairós porque, pese a que no siempre es fácil encontrar una obra para 13 o 14 personajes, “ya no solo es actuar, es colaborar en todo lo que la preparación que lleva consigo: vestuario, escenografía..., muchas cosas que suponen la implicación de todos”, apunta Ana Mas.

En este tiempo “hemos mejorado el perfil como actores tratando de perfeccionar nuestra técnica, hemos evolucionado y hemos intentado alcanzar retos que en un principio pudieran ser complicados”, además de conocerse más como grupo, “un grupo heterogéneo pero que a la hora de estar en el escenario somos muy homogéneos”, a lo que contribuye el director, “que acierta bastante a la hora de asignar los papeles, tratando de conseguir lo mejor de cada uno de nosotros”.

Este sábado hay una nueva oportunidad de comprobarlo en Almudévar con La bella Dorotea.