Cultura

LA ENTREVISTA

Cillas Abadía: “Creo que no te puedes abstraer de quién eres cuando escribes”

La escritora amateur oscense publica su primera novela, un thriller psicológico que se titula Un crimen que el cielo puede perdonar

Cillas Abadía.
Cillas Abadía.
S. E.

La oscense Cillas Abadía publica su primera novela un thriller psicológico, Un crimen que el cielo puede perdonar (Editorial Amarante) “con un final inesperado”, desvela la escritora amateur a este periódico.

“Llevaba muchos años queriendo escribir, pero no podía hacerlo por falta de tiempo, aunque tampoco tenía ninguna historia pensada. Un buen día, aprovechando el parón de la pandemia, me senté con la intención de empezar a escribir mi novela y las ideas fueron saliendo, la verdad, sin mucho esfuerzo”, explica Cillas Abadía.

Advierte que desde niña ha sido una gran lectora “aunque creo que en mi inconsciente ya estaba latente porque me interesaba más desgranar cómo el autor iba soltando las pistas al lector y cómo camuflaba al asesino hasta el final, que descubrir quién era el asesino”.

Esta novela negra, que va desenterrando emociones familiares ocultas, cuya trama parte del asesinato de una rica empresaria que aparece envenenada en el dormitorio de su casa, hace varios guiños a la ciudad natal de la escritora, Huesca, y a su provincia, como “el nombre de algunos restaurantes, un ágape compuesto por platos oscenses y vino del Somontano, una pintura del valle de Benasque…”.

Pero además, confiesa que hay mucho de personal en estas páginas: “Creo que no te puedes abstraer de quién eres cuando escribes y siempre, de un modo u otro, vas dejando tus huellas. En mi caso, además, lo he propiciado en muchos aspectos. Por ejemplo, todos los apellidos que aparecen en el libro son nuestros, de mi familia. El nombre del policía encargado del caso es el pseudónimo que utilizaba mi padre (he querido lanzar al cielo este pequeño homenaje). Y aunque el carácter de los personajes sea totalmente inventado, la familia en la que se produce el crimen es similar a la mía, compuesta por cuatro hermanos y muy matriarcal”.

Y, a pesar de que reconoce que ha sido una experiencia “estupenda”, sentencia que no deja la abogacía “porque es mi profesión y me encanta, me ha dado muchas satisfacciones, aunque también muchos quebraderos de cabeza”.

Cillas Abadía explica que comenzó a escribir durante el confinamiento y que conlleva mucho esfuerzo: “Hay que destinar muchas horas al libro, al principio para pensar y esquematizar y después para escribir”. En este sentido, revela que “escribía por las noches y los fines de semana, conforme me iba introduciendo en la historia, cada vez me pedía más tiempo y tuve que hacer filigranas”. Aun así insiste en que “escribir, de momento, no es más que un hobby. Aunque me ha encantado la experiencia y voy a seguir haciéndolo, lo que no sé es cuándo”.

En cuanto al veredicto de los lectores, afirma la autora oscense que “de momento, solo he recibido felicitaciones. Lo que más destacan es que engancha, que mantiene todo el tiempo la intriga y que el final sorprende”.