Carlos Saura "acompañará" a los oscenses en su día a día gracias a una escultura

Desde este lunes, Carlos Saura “vivirá eternamente” en el inicio de la calle Duquesa Villahermosa desde el Coso, donde “retratará con su cámara” el día a día de Huesca y los oscenses podrán mirarle con admiración cada vez que pasen por este céntrico rincón, situado cerca del número 2 de la calle Padre Huesca, donde este genio nació el 4 de enero de 1932.

Así será gracias a una escultura de Julio Luzán que surgió por un encargo del Gobierno de Aragón tras el fallecimiento del cineasta el pasado 10 de febrero y que se ha inaugurado en presencia del presidente aragonés, Javier Lambán, el alcalde de Huesca, Luis Felipe, y la viuda del cineasta, Eulàlia Ramón, entre otras personalidades.

La piedra sobre la que se erige el busto, en el que aparece la silueta de Carlos Saura con su inseparable cámara de fotos, proviene de La Puebla de Albortón (Zaragoza).

Como se ha sabido en el transcurso del acto, de la localidad aragonesa también provienen las piedras con las que se realizaron el Palacio Real, los módulos centrales del Pignatelli o la Santa Capilla del Pilar.

Esta nueva escultura, que ha causado expectación entre el público, contiene detalles y mensajes vinculados al cine como homenaje a los diferentes oficios que intervienen en la fabricación de la magia del séptimo arte.

El texto que acompaña al busto es otro guiño al talento aragonés, puesto que está escrito con la misma tipografía que utilizó Joaquín Ibarra para imprimir la edición de El Quijote que le encargó la Real Academia de la Lengua Española (RAE) en el año 1973.

“Estoy segura de que él estaría muy contento”

Eulàlia Ramón ha recibido emocionada este nuevo reconocimiento hacia la figura de su marido, al que ha definido como “muy oscense”.

“Es una escultura muy bonita y estoy segura de que él estaría muy contento con ella. Además, está situada en un muy buen ángulo para hacer buenas fotos y esperamos que lo podáis saludar siempre que paséis por aquí”, ha valorado.

La viuda de Saura también ha recordado que el cineasta era “muy oscense” y siempre que regresaba a la tierra que le vio nacer “iba a ver las pajaritas de Ramón Acín” en el parque Miguel Servet y a comprar “los dulces” típicos de la ciudad.

Carlos Saura, un aragonés "universal"

Javier Lambán ha asegurado durante su discurso que Saura “entronca con lo mejor de las tradiciones culturales aragonesas”, igual que “Goya o Buñuel” en su momento.

“Ha sido una de las figuras más importantes del cine en los siglos XX y XXI con películas inolvidables”, ha proseguido el presidente del Gobierno de Aragón, quien ha contado que La prima Angélica (1974) impactó a su generación cuando estudiaban, en un momento en el que provocó “manifestaciones tumultuosas”.

Lambán ha confesado sentirse “profundamente afortunado” por haber conocido en persona a un director que “nos deleitó hasta el final”, ha dicho.

“Cuando murió nos partió el alma y el corazón, y rápidamente pensamos en este homenaje”, ha apuntado sobre la escultura, que conseguirá que “los oscenses lo recuerden de forma eterna”.

Para Luis Felipe, que fue quien eligió la ubicación del busto, este “aragonés y oscense universal” era “un hombre amable, de buen trato y un genio”. 

Y desde este lunes “va a contemplar lo que él quería de la ciudad: la algarabía de sus gentes, los paseos, las conversaciones y los ruidos de la calle cerca donde él nació”, ha rematado.

El acto, que ha estado presentado por Elena Puértolas, directora de DIARIO DEL ALTOARAGÓN, también ha contado con la participación de Estela Rasal, actriz y directora del Festival Internacional de Cine de Huesca, que ha leído un fragmento de El criticón (Baltasar Gracián) y Francisco Javier Bueno Lorenz, que ha tocado con el violín un pasaje de la banda sonora de Goya 3 de mayo (2021), uno de los últimos proyectos del ya legendario cineasta.