Cultura

LA ENTREVISTA

María Pilar Cavero: “Convierto en poemas todo lo que pillo, no solo las sensaciones”

La escritora publica su sexto poemario ‘Caricias y cantares’, con el confinamiento de fondo

María Pilar Cavero, con la escultura de Gerardo Diego, en Soria.
María Pilar Cavero, con la escultura de Gerardo Diego, en Soria.
S. E.

La novelista y poeta oscense María Pilar Cavero publica su sexto poemario Caricias y cantares (Editorial Sial Pigmalión, 2023), un libro intimista en el que, como hace habitualmente, “convierto en poemas todo lo que pillo, no solo las sensaciones sino todo lo que pasa delante de mi los animales, los objetos...”, indica la autora a este periódico.

Y eso es, precisamente, lo que encuentra el lector en su último libro que se divide en seis poemarios y un epílogo. En este sentido, explica Cavero, que hace hincapié en que “mi poesía es directa y profunda a la vez”, que el libro “consta de varias partes, divididas por temáticas”, de los que asegura que tienen en común que “son muy líricos y bastante eróticos”.

“Comienza con una introducción, un primer poema, que se llama Ofrecimiento donde me abro a los lectores. Continúa con Caricias y cantares, que da nombre al libro, donde incluyo los poemas amatorios y el deseo de contacto y caricias porque lo escribí en el momento del confinamiento, que para mí fue de dos años”, comenta Cavero, y continúa diciendo que “esa soledad te ponen en una situación, interna y externa, muy especial”.

El poemario sigue con Despedidas y despertares que trata, según la autora, “de cosas y personas que se van y de abrirme otra vez a la vida, porque soy una persona muy vital y siempre dejo abierto, en todas mis obras, aspectos positivos y el deseo de vivir”. Tras ese optimismo, continúa con Días de sombra, “por la situación que estábamos pasando, no solo por las muertes de seres queridos, también por situaciones que vivimos como la Guerra de Ucrania, los incendios o la erupción del volcán de La Palma”. Instantáneas, es el siguiente capítulo, en el cual la escritora indica que “son momento de mi vida”, escoltado por Naturaleza amiga, en el cual resalta, una vez más, su amor por lo natural, “incluye, -dice-, mi sensación de poderme integrar en ella”.

“Termino con Repiqueteos, que son poemas muy breves, casi haikus, que son una serie de elementos que complementan a los versos anteriores”, y añade Cavero que, por último, incorpora “un poema que es el epílogo que dedico a un joven amigo, gran actor y poeta, Daniel Miguelañez”, quien prologa el poemario.

Cabe destacar, como curiosidad, que cada capítulo incluye una serie de retratos antiguos que servían para enviar postales de los años 1910 y 20, “son retratos en color, -aclara-, que añaden belleza al libro, a parte de formar parte del contenido por el tipo de mujeres y porque es otra manera de comunicarse con la gente puesto que son postales y algunas incluso están escritas”.

La escritora, que utiliza para expresarse indistintamente la prosa y el verso, advierte que este libro “está teniendo muy buena acogida, sobre todo está gustando en Oriente” y argumenta que “tengo muchos lectores hispanistas de países árabes”.