Belén Villadas: "Esta es una historia en la que las familias se pueden sentir reflejadas"

Todo comenzó en la pandemia cuando Belén Villadas Yus retomó una de sus grandes pasiones: la escritura. Y, por ello, quería hacerle un regalo a su sobrino, Hugo. “Lo hice para que él tuviera algo que yo hubiera escrito”, afirma la autora.

Hoy, tres años después y seis libros más tarde, la autora lanza su último cuento, Sueños de Navidad que presentó en la sección infantil de la Biblioteca Pública de Huesca. Durante el acto, Villadas narró la historia para disfrute de todos los niños.

Una historia que está sumergida en el pueblo de su padre, lugar donde ella también ha pasado las navidades. “Cuando llega esta época del año, además de esperar los regalos, es un momento en el que se inculcan los valores familiares, y la amistad”, afirma, a lo que continúa. “La Navidad parece que es más importante cuando tienes a los niños en casa porque reactiva esos momentos cuando les miras”.

En el cuento, unos niños que están pasando la Navidad en un pueblo, desean quedarse a vivir allí. Los padres se enteran de ello y la tía hace de intermediadora. Intentan todo lo posible para cumplir el deseo de los pequeños. “Creo que todas las familias se pueden sentir reflejadas con esta historia”, sostiene.

Como anuncia el nombre, el relato se vuelve un sueño de Navidad porque lo que parecía imposible se convierte en realidad.

Aunque este es su libro y su público sigue creciendo, cuando se sienta escribir lo sigue haciendo para unos únicos destinatarios. “Ahora tengo una sobrina, y ellos son siempre son mis primeros lectores. Recuerdo cuando fui a imprimir el primer libro y lo hice sin el ISBN; luego lo publiqué en las redes sociales, pero lo hice sin pensar para nada que esto fuera a crecer de tal manera”

Villadas trabaja en una lavandería y es voluntaria en una asociación con Síndrome de Down. Y cuando llega el fin de semana se convierte en escritora. “Es cuando tengo más tiempo. Me pongo tanto a dibujar como a escribir; son dos cosas que me relajan mucho”. De hecho, las propias ilustraciones de los cuentos las realiza ella. “A mi familia y a mis sobrinos les gusta, eso es lo que me guía.

Las ilustraciones surgen como si fuesen un puzle. La escritora vuelve tras sus pasos, remarca ideas y después de todo ello realiza el dibujo.

Confiesa que no piensa en el qué pasará mañana, solo en lo que va haciendo y por lo que va pasando. “Me gusta que el lector me dé su opinión, tanto sea buena o mala. Creo que es importante y me gusta porque para mí es un aprendizaje, pero no pienso hasta qué punto puedo llegar” sostiene. Pero la realidad es que poco a poco su firma se va haciendo más conocida y las oportunidad empiezan a aparecer. “Este año estuve en la Feria del Libro de Zaragoza y no me lo creía. “Es bueno guardarte y quedarte con esos momentos como si fuesen un álbum”, finaliza.