Raúl Massana: "Es muy complicado estar a la altura de un país que se ríe de todo"

Estar más de 18 años encima de los escenarios da mucha confianza a un cómico. Sobre todo porque el “oficio” como dice Raúl Massana te da tranquilidad y te permite improvisar con ese público que ha crecido con unos códigos que cómicos de su generación han puesto en escena durante tantos años en “garitos y salas duras”. “Ahora es mucho más fácil”, señala Massana, aunque confiesa que siempre antes de la actuación tiene un poco de miedo, sobre todo por saber como va estar el público. “Aunque soy de los que confío en que va a salir bien”, afirma.

Mañana por la noche lo podremos ver encima de la tablas de El Veintiuno que, aunque estamos más acostumbrados a que sea un lugar en el que se albergan conciertos, para esta ocasión y otras dos siguientes fechas se convertirá en una sala de comedia.

El espectáculo de Massana se centra en la improvisación y en el juego con el público, para así conseguir que sea vivo y no esté tan encorsetado. “Voy jugando a lo que vaya pasando en la sala. Gracias al movimiento que se ha generado en redes, el público está más predispuesto”, apunta, aunque matiza. “Muchas veces esto es bueno por el tipo de comedia que hacemos algunos, pero juega en contra del cómico clásico que va hacer comedia pura y la gente no hace más que decirle: ‘Pero pregúntame’ (risas)”.

Su comedia con el paso del tiempo ha cambiado y evolucionado. Cuenta que con 25 años intentaba ser más transgresor, pero la paternidad y los años han cambiado su manera de hacer las cosas. “Hoy lo que me preocupa son mis hijos y hacer cosas con ellos. Parece que tienes miedo a que tus hijos revisen lo que hacías antes”, admite.

Ahora se considera un cómico más blanco. Entre otras razones porque su público también es más familiar. “No es que no quiera ofender más, sino que lo que me preocupa ahora seguramente sea más blanco que lo de hace 20 años”, señala, y remarca: “Con 20 años buscas transgredir y con 40 quieres pasártelo bien”.

El cómico todavía recuerda cuando actuó en el Teatro Olimpia mientras grababa Comedyantes de Aragón TV. "Guardo buen recuerdo de Aragón. El trato de la gente es muy cercano.  Hay gente que le gusta decir que las personas del norte son frías, pero son muy hospitalarios y agradables. Siempre me acabo de llevando cosas para los niños”, continúa.

Massana afirma que en España gozamos de una buena salud de comedia, sobre todo por la gran calidad de cómicos a nivel mundial. “Cuando viajas, te das cuenta de lo bien valorados que estamos, pero sucede como el fútbol que todos sabemos mucho de humor”.

Por ello, cree Massana que “es muy complicado estar a la altura de un país que se ríe de todo”. “Pasa algo y al momento tenemos 30 chistes y 20 memes. Somos el Brasil del humor. España es un país muy pequeño con muchas cosas distintas: una especie de cajón de sastre, y en ese caos sobresale la comedia”, remata.