Aurora Pinto: “El acoso laboral es un tema muy poco tratado en la ficción literaria”

Aunque es común encontrar ensayos o libros de autoayuda sobre el acoso laboral, todavía “es un tema muy poco tratado en la ficción literaria”, que siempre supone “una manera de narrar la realidad, de enfrentarnos a los aspectos más oscuros que se nos presentan en la vida”. Por eso, Aurora Pinto Mariñoso (Barcelona, 1961) ha decido abordar esta lacra en Cuestairse, que presenta este martes (19:00 horas) en la Biblioteca Municipal Ramón J. Sender de Huesca.

Editada por Los Libros del Gato Negro, la novela cuenta la historia de Malena, que sufre el hostigamiento de un delegado que llega a su oficina. “Ella es exigente y eficaz en su trabajo, y poco a poco se va despersonalizando, víctima del acoso y la humillación”, cuenta la autora, periodista y productora audiovisual, que reside en Candasnos desde hace más de 40 años.

La protagonista experimenta lo mismo que muchas de las personas que sufren acoso laboral, que “no son capaces de detectar lo que les ocurre hasta que, lamentablemente, ya están muy degradadas”, dice la escritora.

“Uno de los primeros signos es que no se les llame por su nombre, que se les ignore, que se les asigne tareas imposibles o se les desubique de su puesto. Luego puede llegar incluso el insulto en público o el acoso directo”, enumera.

Para crear sus textos, Pinto conoció de cerca varios casos y recopiló documentación de algunas víctimas, descubriendo que “en 2022, más del 62 % de las denuncias fueron interpuestas por mujeres”.

La historia de la novela se sitúa entre 2006 y 2011, cuando se comenzaba ya a hablar de ‘mobbing’ y surgieron el marco legal y los protocolos para terminar con esta lacra, “pero no había todavía ni costumbre ni jurisprudencia”, matiza.

Por fortuna, “hoy es obligatorio actuar en todas las empresas y el tema es ya conocido, pero aún se siguen silenciando muchos casos y son muchas las víctimas que abandonan su puesto de trabajo y sus derechos laborales por no enfrentarse a la empresa y al acosador”, asevera.

Cómo dice Paul Auster, “qué mejor material para escribir que lo que conocemos de cerca”, así que la autora ha añadido algo de sí misma al personaje, que no es autobiográfico.

“Que quede muy claro: yo trabajé, como Malena, en una entidad financiera, pero jamás sufrí allí acoso laboral. Mis compañeros eran encantadores y sigo manteniendo muy buena relación con todos ellos”, especifica.

Cuestairse existe porque la autora siempre ha creído que “las novelas, además de entretener, pueden generar debate y concienciación”. Así, la periodista desea “que si la leen personas que estén pasando por una situación similar puedan encontrar un punto de esperanza”.

Por último, Pinto da las gracias a Arántzazu Añaños por contar con ella en la Ramón J. Sender, una invitación que recibió “con alegría y una emoción enorme”. 

“La novela es un buen regalo de Navidad para familiares y amigos, y espero que muchos oscenses pueden leerla y me trasladen sus impresiones”, concluye.