Cultura

LA ENTREVISTA

Nuria Alonso: “La crioablación podría contemplarse como alternativa a la cirugía”

La radióloga jaquesa del Hospital Universitario de Álava practicó esta técnica pionera contra el cáncer de mama

Nuria Alonso, en el centro sanitario de Vitoria.
Nuria Alonso, en el centro sanitario de Vitoria.
S. E.

Este domingo se celebra el Día Mundial contra el Cáncer, una enfermedad frente a la que siguen registrándose avances, como el uso de la crioablación, una técnica pionera que emplea el frío para destruir tumores y que “tiene el beneficio de que evita la operación y los riesgos derivados de la cirugía”, según explicó Nuria Alonso, de modo que “la recuperación es muchísimo mejor”.

Asimismo, “es muy rápida (dura 30-40 minutos, según el tamaño del tumor), es totalmente indolora y, una vez terminada, la paciente se va a casa”, como apuntó la radióloga, después de formar parte del equipo médico que comenzó en noviembre a emplear esta técnica en Vitoria con una mujer de 89 años que “tenía una diabetes terrible y que iba en silla de ruedas”.

El uso de la crioablación contra el cáncer de mama “se reserva para mujeres con mucho riesgo quirúrgico”, como esta paciente, cuya intervención “salió bastante bien”. 

“La llamamos al día siguiente y dijo que en la mama no había tenido dolor”, señaló la jaquesa, añadiendo que “se le va a hacer un control mediante biopsia”.

La crioablación “usa una aguja y una potencia en función de cómo se quiere hacer la bola de hielo que engloba el tumor y mata las células en un radio calculado previamente”, como dijo Nuria Alonso, subrayando que “el frío genera un efecto analgésico”, a diferencia de intervenciones similares que emplearon el calor y que fueron “más rápidas, pero presentaron la desventaja de que “las pacientes notan dolor”.

La radióloga “tenía ganas de hacer esta técnica”, mediante el uso del frío, “priorizando el confort de la paciente”. Además, se muestra “partidaria de emplearla más a menudo” y cree que, “si se demuestra que es igual que la cirugía, puede ser muy bueno” para mujeres “con un riesgo quirúrgico”, a las que “ahora sí se les puede hacer algo”.

El tratamiento del cáncer de mama sigue un protocolo muy consolidado y basado en la evidencia científica”, continuó la jaquesa, agregando que la crioablación “es una técnica muy nueva y no se ha extendido de forma generalizada”. “Si en 5-10 años se demuestra que tiene una eficacia similar” al quirófano, “se podría contemplar como una alternativa a la cirugía”.

Por ahora, “se observa una mejoría en la supervivencia” de las personas sometidas a la crioablación, entre las que “hay mujeres muy mayores, muy obesas” o con otros factores de “un elevado riesgo quirúrgico”. 

Con estas pacientes “se empleaba la hormonoterapia, para frenar un poco el avance de la enfermedad, o tratamientos complementarios, pero no se podía hacer nada y ahora se puede eliminar el tumor”.

En el caso del Hospital Universitario de Álava, “un porcentaje muy alto de las mujeres acude a hacerse la primera mamografía nada más recibir la carta” del programa, que “empieza a los 50 años, si no hay factores de riesgo”. 

Además, “en la consulta vemos a muchas chicas que vienen porque se palpan bultos”, como apuntó Nuria Alonso, para la que “eso quiere decir que la gente joven también está concienciada”.