Cultura

Universidad ciudadana

Luis Lles: “La música evoluciona pero lo hace de manera cíclica”

El experto musical imparte en el Benito Moliner el curso musical: ‘Del Blues al reguetón’

La última sesión del curso será mañana, a las 19:00 horas, en el Centro Cultural Manuel Benito Moliner.
La última sesión del curso será mañana, a las 19:00 horas, en el Centro Cultural Manuel Benito Moliner.
Javier Navarro

El blues y el reguetón a priori son dos géneros musicales que no tienen nada que ver. Entre medio de ambos los crooners de los años 40, la canción melódica, el pop, el rock, la canción de autor, la salsa, el soul el punk, el hip hop o el house han alimentado a la música popular durante el siglo XX y lo que llevamos del XXI, y han creado un mosaico rico y variado que ha formado la banda sonora de nuestras vidas.

“El blues y el reguetón tienen algo en común muy claro: los dos nacen de las capas más desfavorecidas de la ciudad. El primero surgió de los esclavos negros, en los burdeles y prostíbulos de Estados Unidos, mientras que el reguetón lo hizo en países como Puerto Rico o Panamá”, afirma Luis Lles, colaborador del DIARIO DEL ALTOARAGÓN y coordinador del suplemento Señas, quien imparte el curso organizado por la Universidad Ciudadana, La música popular de los siglos XX y XXI. Del blues al reguetón en el Centro Cultural Manuel Benito Moliner.

Lo ha dividido en 12 bloques y en cada clase se ven cuatro. El primero, que lo impartió el pasado día cinco, se centró, en primer lugar, en el blues y el jazz; en segundo lugar dedicó una parte de la sesión a la música clásica contemporánea, que es la única excepción que ha incluido Lles en referencia a la música ‘culta’, “porque es del siglo XX y, sobre todo, porque en los últimos tiempos ha sufrido una hibridación entre lo que sería la música experimental con la de raíz clásica”. El experto musical también habló de la conocida como música ligera, de los crooners de los años 40, la canción melódica como Charles Aznavour, Julio Iglesias, etc.,  para finalizar con el folk y la canción de autor.

El curso continuó ayer con dos protagonistas muy importantes: el rock y el pop. Además de estos, Lles habló del R&B, el soul y finalizó con las músicas del mundo. Todas estas sesiones siguen una estructura cronológica donde se puede ver la evolución y los paralelismos que todos los géneros tienen entre sí.

Para el crítico de música, ese progreso es lógico y cíclico. “Por ejemplo, en los 70, el rock se va sofisticando, pero llega al punk y rompe con todo eso. Y sucede continuamente, como con el indie y el reguetón”, argumenta. Y es que el primero de estos va un poco a lo emocional, a lo más cerebral, mientras que el segundo va a lo sensual, “hacia lo que sería el hedonismo”. “Son ciclos. Tras una etapa determinada en el que predomina un tipo de emoción, le sucede otro que es totalmente lo contrario”, considera, aunque remarca. “En ambos permanece el deseo de innovación. La música clásica contemporánea quería romper con las ideas preconcebidas, y en la música electrónica eso también se ve: cuando surgió era una música totalmente rompedora”.

La evolución y el paso del tiempo también ha traído consigo nuevas maneras de entender de la música y que muchos de los prejuicios que antes sobrevolaban sobre los amantes de la música desaparezcan. “Antes, si te gustaba el rock, ya no te podía gustar la música disco”, piensa; por ello, celebra el desprejuicio de la Generación Z. “Es muy positivo porque lo que quiero inculcar con este curso es que la gente abra las orejas. La música no es mala en sí y pretendo hacérselo entender a la gente”, explica.

La tercera y última sesión de este curso tendrá lugar mañana, a las 19:00 horas, en el Centro Cultural Manuel Benito Moliner. Habrá un hueco especial para el flamenco que, aunque está dentro de las músicas del mundo, Lles le va a dedicar un espacio completo. “Es uno de los géneros más importantes que ha dado España y, además, ha sufrido una evolución muy importante. Se ha mezclado con el rock, con el punk o incluso con el tecno”, considera. Luego seguirá con la fusión y el mestizaje; el tercer bloque estará dedicado al hip hop y los sonidos urbanos, y el curso finalizará con la electrónica y todos los subgéneros que hay alrededor de la música de baile.

El futuro de la música

“No hay una dirección única, es multidireccional”, considera Lles acerca del futuro de la música. Lo dice porque considera que al mismo tiempo que existe el hyperpop, “como género en boga”, está el reguetón, que es algo distinto y, por otro lado, los Rolling Stone o los U2 siguen llenando estadios. “Antes sí que era más así, porque todos los géneros estaban muy marcados. Gracias a redes sociales y plataformas se ha promovido está gran diversidad. Ahora prácticamente todo es posible, no hay unas líneas determinadas”, afirma.

El experto en música diferencia la evolución con la tendencia y lo ejemplifica con la música latina y su éxito mundial en los últimos años: “No es lo que marca el devenir de la música, sino que simplemente surge como un nuevo movimiento que convive con los otros”.