Diego Anido: “He creado una amable pieza de teatro experimental metabiográfica”

El ciclo municipal Jueves a Escena se traslada a este sábado para programar el quinto espectáculo en solitario de Diego Anido, El Dios del pop, con el que el gallego no dejará indiferente al público oscense.

“Se trata de una amable pieza de teatro experimental metabiográfica, en la que un extraño personaje se desplaza por el escenario tratando de contar parte de su vida a través de su voz, sus bailes y canciones tocadas con extraños instrumentos”, asegura Diego Anido Alonso (Santiago de Compostela, 1976) en una entrevista con este periódico.

El Dios del pop surgió durante el periodo comprendido entre 2015 y 2019, cuando el actor montó en su casa una especie de albergue que acogía a peregrinos que hacían el Camino de Santiago.

“En ese momento, todas las tardes aparecía un momento de ocio cuando la casa estaba llena y podía sentarme a escribir en el mostrador donde normalmente atendía a la gente. Así que la obra nació fruto del aburrimiento”, confiesa.

Aunque se trata de una propuesta muy personal, en la que el intérprete introduce al público en su genial universo, la historia no tiene ninguna moraleja, porque “no soy el tipo de artista que transmite un mensaje”, matiza.

Anido se ha inspirado en las vidas de artistas como James Brown, Michael Jackson, Whitney Houston, Madonna, Bambino, Lady Di, Poli Díaz, Elena Ferrante, Joe Balan y en la suya propia para crear esta propuesta.

“No sé si existe el término metabiografía, pero es el que mejor la define. La obra está creada con trocitos de estos personajes, incluyéndome a mí”, especifica.

Música en directo, danza y teatro son los elementos escénicos del montaje, que supone “un peculiar formato”, avanza.

Por este motivo, el actor, cada vez más popular por sus obras de teatro y por su participación en filmes como As bestas (Rodrigo Sorogoyen, 2022), que le reportó una nominación a los premios Goya, sostiene que la obra “no es recomendable”.

“La gente que venga va a presenciar lo impuro, lo hostil, lo divertido... Espero que en Huesca exista un amplio público ávido de experiencias”, concluye el gallego.