Cultura

Oroel Teatro representa en Jaca 'La casa de Bernarda Alba'

Diez mujeres pondrán en escena el célebre drama de Lorca

Varios actores de Oroel Teatro y la directora, con los premios que recibieron en el certamen de Almudévar.
Varios actores de Oroel Teatro y la directora, con los premios que recibieron en el certamen de Almudévar.
S. E.

Oroel Teatro va a escenificar “La casa de Bernarda Alba”, de Federico García Lorca, este sábado a las 21:30 horas y el domingo a las 20 horas en el Palacio de Congresos de Jaca. Además, el sábado por la tarde ofrecerán una sesión dirigida exclusivamente a las personas mayores. Las entradas tienen un precio de 8 euros y se pueden adquirir en la taquilla.

El nuevo montaje llega poco después del 25º aniversario del grupo, que se encuentra en racha, puesto que el pasado fin de semana triunfó en el 22º Certamen de Teatro Pedro Saputo de Almudévar, que premió la representación de la comedia La valentía con seis galardones, cuando los de Jaca estaban nominados en siete de las ocho categorías de la muestra autonómica.

La casa de Bernarda Alba cuenta con un reparto compuesto por Cecilia Ramón (Bernarda), Beatriz López (Angustias), María Reyes Abril (Magdalena), Bianca Ancares (Amelia), Erika Medrano (Martirio), Piluca Ramón (Adela), Feli Beitia (María Josefa), Teresa Bescós (La Poncia), Elena Añaños (criada) y Concha Tovar (Prudencia).

Dentro del apartado técnico, que encabeza Concha Tovar, como directora de Oroel Teatro, también figuran José Manuel Oriol y Quico Viscasillas, al frente de la escenografía y el montaje técnico; Javier Cortés, con el sonido; y Javier Orea, autor del diseño del cartel. Además, se efectuó una colaboración con el Orfeón Jacetano, que realizó la grabación de los coros.

“La casa de Bernarda Alba”, considerada la obra cumbre de Lorca, fue escrita en 1936 (el año en el que el autor granadino fue fusilado en su tierra) y se estrenó en Buenas Aires (Argentina) en 1945. El drama refleja las constantes del teatro lorquiano, sobre todo la lucha entre el principio de autoridad y el de libertad, en este caso a través del encierro obligado en una casa rural habitada solo por mujeres, que se encuentran reprimidas sexualmente.

Tras representar “Bodas de sangre” hace una década, Oroel Teatro vuelve a asomarse a la obra de Lorca con un montaje que presenta “una estética renovada”, pero “un escrupuloso respeto al maravilloso texto del poeta”