Cultura

LA ENTREVISTA

Juan Bola: “El azúcar es un verdadero drama en nuestra sociedad”

Nutricionista y técnico de actividades físicas y deportivas, es el autor del libro ‘Nutrición evolutiva. El despertar de la especie’

Juan Bola.
Juan Bola.
S. E.

“El libro se está vendiendo muy bien”, confiesa el nutricionista y técnico de actividades físicas y deportivas Juan Bola después de que su primera publicación, Nutrición evolutiva. El despertar de la especie (Alienta Editorial), supere ya los 6.000 ejemplares vendidos. “El objetivo es llegar a las 10.000 copias en un año”, indica, satisfecho con el interés que despierta que le ha llevado a realizar entrevistas a nivel nacional, por ejemplo en la Cadena Cope, o en diarios como El Mundo; a impartir conferencias en Universidades y foros especializados por toda España; y a tener saturadas sus consultas ‘online’. “A la gente le interesa. Se basa en la alimentación paleo, en volver a cómo se alimentaban nuestros ancestros según los estudios”.

“Los homo sapiens, a los que pertenecemos, tenían la carne en la base de la pirámide alimentaria porque, antes de la agricultura y la selección artificial, recolectar para alimentar al clan era difícil”, asegura, recordando que, entre otros factores, la caza acabó con mega fauna como los mamuts. “Se trata de volver al origen porque hay muchos alimentos modernos, generados por el ser humano, para los que nuestro genoma fijado hace 40.000 años no está adaptado”.

En la pirámide alimentaria que propone Juan Bola en su libro, los alimentos de origen animal ocuparían la base. “Luego habría vegetales, tubérculos, raíces, frutas. No se sataniza ningún alimento que venga de la naturaleza”. El azúcar, que para Bola no es un alimento, es un producto, “es un verdadero drama en nuestra sociedad”. Apunta que “un cazador recolector consumía 2 kilogramos de azúcar al año, sobre todo de la miel, y hoy en día estamos consumiendo 70 o 100 kilogramos por persona. Pasa lo mismo con las harinas refinadas y, en tercer lugar, los aceites de semilla, de girasol, canola, soja, son muy complicados con procesos severos detrás que oxidan las grasas y tienen altas concentraciones de omega 6 que, en exceso, es un riesgo a nivel cardiovascular y de inflamación crónica, por ejemplo”, detalla.

Juan Bola lamenta también que “la globalización alimentaria ha desplazado alimentos de nuestra cultura como las vísceras, con una densidad nutricional espectacular. Es importante recuperar esos alimentos dentro de una buen alimentación”. Respecto al ayuno, tan de moda, considera que “puede ser beneficioso de forma puntual, pero no crónico. Se trata de escuchar al organismo”, dice, abandonando la glucodependencia que nos hace perder el centro de saciedad para lo que ayuda una alimentación baja en carbohidratos.

El nutricionista grausino aboga por una nutrición que supera la alimentación. “No todo es alimento cuando hablamos de nutrición. El sol genera óxido nítrico y vitamina D que nos alimenta. Nos nutrimos de lo que nos echamos en la piel, por lo que hay que usar productos inocuos, y también nos nutren las relaciones sociales o la exposición al frío, que aumenta drásticamente la dopamina”, asegura.