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La Academia de la Jota reconoce la labor de ocho altoaragoneses

César Conte, Laura Gella, Visitación Sánchez, José Antonio Lacoma, Andrés Sobreviela, Rafael Salas, José Luis Barrao y Susana Deito

Los Académicos de Honor altoaragoneses, con las autoridades que les acompañaron.
Los Académicos de Honor altoaragoneses, con las autoridades que les acompañaron.
S. E.

La Sala de la Corona del Edificio Pignatelli, sede del Gobierno de Aragón, ha acogido el acto de nombramiento de los Académicos de Honor de la Academia de las Artes del Folclore y la Jota de Aragón, en el que se ha reconocido la labor de más de una treintena de figuras del folclore y la jota, a personas pertenecientes al mundo de la comunicación y a las fundaciones Cultus, Creativa y Ecuup.

Presidida por Carmelo Artiaga, la Academia se fundó en 2017 por 40 personas y hoy cuenta con más de 600, y tiene como fin preservar, difundir y valorar el vasto legado recibido de nuestros mayores, que ayer recordó Artiaga, quien ha reclamado más espacios públicos para que los artistas contribuyan a fomentar la cultura y la presencia de la jota en la educación con el canto y el baile primigenios y los instrumentos musicales que los acompañan.

El acto estuvo presidido por la directora general de Patrimonio, Gloria Pérez, que ha destacado la importancia de la jota como seña de identidad de Aragón y como parte de un acervo cultural que se mantiene vivo gracias a joteros y joteras como los distinguidos, y entre los que ha habido siete altoaragoneses: César Conte, Laura Gella, Visitación Sánchez, José Antonio Lacoma, Andrés Sobreviela, Rafael Salas y José Luis Barrao. A ellos se sumó en el homenaje a la prensa Susana Deito, periodista de DIARIO DEL ALTOARAGÓN. Todos ellos ha estado arropados, además de por el vicepresidente de la academia por Huesca, Roberto Ciria, por la diputada provincial Sofía Avellanas, el concejal del Ayuntamiento oscense Ramón Lasaosa y la coordinadora de CHA, Sonia Alastruey.

De forma excepcional, porque estos reconocimientos se hacen en vida, ayer se ha recordado a título póstumo a Laura Gella, ya que este acto estaba previsto para finales de enero, se tuvo que retrasar, y ella ha fallecido recientemente. Fue su nieta Laura la que ha recogido el título de Académica de Honor, y en el caso de Visitación Sánchez su hija Cristina Pérez.

Estas dos bailadoras compartieron una experiencia que marcó sus vida, ya que hicieron las Américas con la jota.

Laura Gella

Laura Gella nació en 1927. Criada en el corazón del Pirineo, desde niña se impregnó de su cultura y sus tradiciones. Descubrió el mundo de las danzas y empezó a bailar la jota. En 1940, con sólo 18 años. emprendió el viaje, que sin saberlo, le iba a cambiar la vida. Embarcó en el Monte Ayala, que salió desde Bilbao rumbo a Hispanoamérica para mostrar y compartir la jota con todo el mundo, en un recorrido por 14 países. A lo largo de su carrera recibió varios premios en Huesca, y actuó en diferentes ocasiones de la mano de Carlos Vidal o Sara Villacampa.

Visitación Sánchez

La oscense Visitación Sánchez comenzó a bailar la jota con 14 años en el grupo de Educación y Descanso de Huesca con Pablo Luis Maza, y aprendiendo a cantar con Antonio Seral. Nacida en el 32, en el 1949, menor de edad y con un permiso especial, formó parte de la agrupación de Coros y Danzas de Huesca que se embarcó en el buque Monte Ayala, un viaje en el que las joteras oscenses, porque solo bailaron mujeres, ejecutaron por primera vez la jota de San Lorenzo. A su vuelta participó en la película Ronda española que reproduce ese viaje. En los años 50 recorrió múltiples lugares de España, París y la Exposición Universal de Bruselas de 1958. Dejó el baile pero no la jota, y hoy, con más de 90 años, todavía canta en las en las reuniones familiares.

César Conte

César Conte, de Castejón de Monegros, se trasladó a Huesca por trabajo a los 22 años. En la Escuela Municipal fue alumno de Camila Gracia durante tres cursos, y tras un paréntesis de una década, volvió a retomar las clases con José Rodrigo, y tras su fallecimiento con Roberto Ciria. En 2010 se incorporó a la Agrupación Folclórica Santa Cecilia. A sus 77 años sigue recorriendo infinidad de localidades con el grupo, compaginando estas actuaciones con colaboraciones con la rondalla de su localidad natal.

José Antonio Lacoma

José Antonio Lacoma nació en Peralta de Alcofea en abril de 1947, y su historia en el mundo del folclore es distinta a la de la mayoría de joteros ya que empezó hace 13 años a formar parte activa de la Agrupación Santa Cecilia. Desde entonces, una media de más de 50 actuaciones al año, acompañan su trayectoria. Sin aparente tradición folclórica familiar, recientemente ha sabido que su padre era buen cantador y que una tía suya cantó con Camila Gracia; tal vez, de ahí viene la forma tan especial que tiene de decir la jota.

Andrés Sobreviela

Andrés Sobreviela, natural de Épila y altoaragonés de adopción, es un cantador y laudista perteneciente a una gran estirpe jotera. Nacido en 1942 y con 10 años se trasladó a El Temple, donde continúa afincado a día de hoy. Fundó, junto a los joteros de la localidad el Grupo Folclórico San Isidro, que este 2024 cumple 60 años. En la actualidad sigue en activo y colabora con los grupos La Jota de Zuera y San Nicolás de Gurrea de Gállego.

Rafael Salas

En el caso de Rafael Salas, su vida ha estado siempre vinculada al mundo del folclore. Este montisonense empezó a tocar su primera bandurria con 11 años y con 77 no se ha desvinculado de la música aragonesa. Miembro del Grupo Folklórico Nuestra Señora desde 1963, en todos estos años ha formado parte de la junta directiva, con la que fundaron el Festival Folklórico del Cinca Medio, un evento que se realiza desde 1998. Autodidacta en el aprendizaje de la gaita de boto y la dulzaina, es miembro de la Asociación de Gaiteros de Aragón desde 1993. A todo ello hay que sumar que fue colaborador durante doce años del programa de Radio Cinca 100 de Monzón, El folklore.

José Luis Barrao

Para José Luis Barrao el folclore es una pasión que, si bien no ha practicado, sí ha disfrutado en toda su plenitud como espectador. Amigo de grandes joteros, acompañó en innumerables ocasiones a Rafael Ayerbe Santolaria en sus viajes por la provincia de Huesca cuando hacía las crónicas para DIARIO DEL ALTOARAGÓN, periódico con el que siguió colaborando y en el que durante muchos años sus fotografías han ilustrado las informaciones de festivales y concursos, inmortalizando momentos que han sido parte de la historia del folclore en la provincia.

Susana Deito

Completó la representación de académicos altoaragoneses la periodista jacetana Susana Deito, que lleva más de tres décadas difundiendo la jota y el folclore a través de las páginas de DIARIO DEL ALTOARAGÓN. Sus primeros contactos informativos fueron con Rafael Ayerbe, de quien recogió el testigo. A comienzos de los 90 empezó a hacer una página en el suplemento dominical, que primero se llamó ‘Folklore Altoaragonés’ y después ‘Tierra Nuestra’, por la que han pasado grandes figuras de la jota en la provincia de Huesca, así como todos los grupos folclóricos. Como profesional de la comunicación y experta, ha presentado galas y festivales y, a día de hoy, sigue informando de todo lo que ocurre alrededor del folclore.

A estos ocho nombre se ha sumado una treintena las Zaragoza y Teruel, aunque la despida del acto ha vuelto a tener tinte oscense con la interpretación del S’ha feito de nuey, de José Lera.