Una excursión incómoda con frío y sobre todo viento

HUESCA.- "En un lugar de Monegros de cuyo nombre si me quiero acordar, con frío y un viento silvante-helador partieron 44 valientes en pos de realizar la prevista excursión. Estos fornidos senderistas no medraron en su empeño".

La sección de Turismo por el Alto Aragón de Peña Guara salió a las 7:30 horas de Huesca en dirección a Grañén donde se tenía que coger al paso a dos compañeros, continuando hacia la localidad de Farlete (Zaragoza). Al bajar del autobús el frío y sobre todo el viento soplando con su habitual intensidad invitaba a quedarse en el autobús, pero la totalidad de los participantes salimos con decidido empeño de cruzar dicha población en busca del alto de San Caprasio.

Cercano a la población se pasó por el Santuario Virgen de la Sabina. Caminando el frío se notó menos, pero las rachas de viento con su sórdido canto nos hacía difícil el paso y la estabilidad. Comenzando a subir las pequeñas ondulaciones de terreno nos iban de vez en cuando calmando el molesto fluido del aire.

Buscando un pequeño abrigo y al sol se almorzó reponiendo fuerzas. Ya dejamos la pista para afrontar definitivamente en unas fuertes rampas de subida, llegando al alto de San Caprasio. La mitad de los excursionistas subió a la parte más alta, donde existen unas antenas de telefonía, y la otra mitad pasamos a ver las cuevas. Posteriormente cambiaron los papeles. Así se completaban los primeros 10 km., los de mayor aporte físico. En estas cuevas se instalaron en el pasado siglo XX los Hermanitos de Jesús, congregación laica y católica fundada por el francés Charles de Foucauld, que llegaron en 1956. Los últimos seguidores fueron los hermanos franceses Ramón y Enrique, que cambiaron la ermita por habitar en una casa de Farlete en 1979, dónde continúan viviendo. Es de hacer constar que las cuevas eran el escondite predilecto del Bandido Cucaracha en el siglo XIX.

Acabado este menester y como todavía quedaba bastante camino para llegar al final en Alcubierre, se tomó una senda casi recta y en descenso entre pinos, por donde transitaban antiguamente los lugareños, desembocando en la pista casi sin uso por sus malas condiciones de circulación y con abundantes puntos encharcados de hielo y agua. Antes de llegar a Alcubierre el conductor del autobús salió al encuentro quitándonos 4 km. de camino de los 20 previstos. En este último tramo se hacía notar la presencia de grandes sabinas de grandes dimensiones, como no habíamos visto en otro lugar.

Subimos al autobús y en breves momentos llegamos al punto de finalización, distribuyéndonos en dos establecimientos de la localidad para efectuar la comida. A las 16:40 horas partimos hacia Huesca comentando que la excursión había sido dura por las circunstancias apuntadas, pero que a la vez había sido gratificante por las vistas desde San Caprasio y las cuevas.

La próxima excursión será de Rutas por la Provincia, este domingo y con el trayecto Hospitaled -Castillo y Almazorre.