Cristina Espejo afronta este viernes sin presión la final continental de 3.000 metros bajo techo

HUESCA.- Después de un viaje largo y pesado que dejó a la expedición española en Glasgow al filo de la medianoche del pasado miércoles, la selección pudo tomar contacto con la pista y realizar un entrenamiento que dejó "buenas sensaciones" a Cristina Espejo. "Es un estadio muy bonito, no estamos acostumbrados a ver algo así. Y la pista me ha encantado. En el entrenamiento no he tenido unas sensaciones increíbles pero eso es bueno porque a veces pasa que si un día te encuentras muy bien igual al siguiente no estás al cien por cien".

Acude "sin presión" porque, como ella misma señala, "la presión ya me la llevé toda a Antequera y fue allí donde hice todo lo que tenía que hacer". A fin de cuentas, comenta, "debo tener una de las peores marcas porque hay muchas atletas que bajan de nueve minutos".

Con una final directa y una nómina de una veintena de atletas, la carrera le da "un poco de respeto". "Lo más complicado va a ser la parte del primer kilómetro, hasta que se vayan definiendo las posiciones. Si salgo ilesa de ese primer tramo, porque soy pequeña y físicamente débil y no recibo muchos golpe, creo que puedo hacerlo bien. Creo que va a ser una carrera rápida, no táctica. Y si la gente sale a correr, me beneficia para poder hacer una buena marca. Estoy ilusionada por haber vuelto a vestir La Roja. Me gustaría hacerlo bien y para eso tendré que correr inteligentemente", señala la montisonense, que no estaba con la selección desde el Europeo de Chia en 2016.

VILLACORTA: "CRISTINA ESTÁ MUY MOTIVADA"

José Enrique Villacorta, entrenador de Cristina Espejo, ve a la atleta montisonense "muy motivada" ante el Campeonato de Europa que este viernes afronta su pupila. "Es una carrera muy llamativa para ella y no deja de ser su debut con la selección española absoluta, que eso es siempre un aliciente para cualquier deportista y en concreto para una persona como ella que ha sido internacional en todas las categorías inferiores".

Son casi tres años de trabajo conjunto en el CAR de León, donde ahora estudia y reside Espejo y el preparador destaca la evolución que ha llevado en este tiempo. "Cristina es una persona muy trabajadora, venía con mucho déficit y muchos problemas físicos. El primer año nos costó sobre todo volver a coger el estado de forma y el tono y la competitividad que ella atesoraba y atesoró durante las categorías menores, como lo reflejaron los resultados, y a partir de este año hemos tenido bastante continuidad en el trabajo, en los entrenamientos, en las rutinas diarias y eso es lo que ha propiciado que su calidad y su atletismo haya salido otra vez a la luz".

Asegura Villacorta que no le sorprendió la explosión de Cristina en el pasado Campeonato de España con la gran carrera que hizo. "Para nada. Lo bueno que tiene este deporte es que si tú estás trabajando todos los días sabes más o menos por dónde puedes andar. Y sabíamos que podíamos estar haciendo algo parecido a lo que hizo. Me sorprendió su actitud en cuanto a su lucha, su constancia y su manera de defender su puesto de campeona de España. Eso quizás es lo más complicado de hacer y fue capaz de hacerlo perfectamente. Eso fue lo más destacable, pero no la capacidad de correr en nueve minutos".

El mismo Villacorta fue quien espoleó a la montisonense a que no había más táctica en aquella carrera que lanzarse a tumba abierta desde el primer momento para conseguir la mínima europea, que se le había resistido por centésimas en dos ocasiones en escasas fechas y Antequera era la última oportunidad. "El objetivo era claro, intentar hacer esa mínima y volver a estar otra vez con la selección española. Y yo se lo dije: el no ya lo tenemos, ahora solamente es intentarlo. Si nos sale, perfecto, lo hemos conseguido. "Que no nos sale Pues por lo menos lo hemos intentado, que eso es lo más importante en cualquier deportista".

El 3.000 de este viernes (22:40 hora española) es final directa y Villacorta vaticina "una carrera que va a ser un poco locura porque salen 19 chicas y creo que va a ser muy trabada. Es un hándicap, pero nuestra ventaja va a ser que parte como una invitada a esa final. Mejorar los puestos que vaya haciendo, encontrarse bien en carrera y sobre todo no pegarse para no gastar fuerzas".

Concluye la corta temporada de pista cubierta pero no el invierno ya que queda el Campeonato de España de cross en Cáceres y el Mundial de cross por relevos mixtos. Por medio hará un 5.000 que servirá para aprovechar y evaluar el estado de forma y en qué marcas puede estar. Y de ahí a preparar la pista al aire libre con el 1.500, un Mundial en el horizonte y los Juegos Olímpicos de Tokio como gran objetivo el año próximo. "Yo tengo mucha confianza. Ese es el objetivo de todos los deportistas, luchar por estar allí. Así que, como le digo yo, el no ya lo tenemos. Vamos a por ello".