Deportes

CICLOTURISMO

Una Tarbes-Huesca "aventurera"

Los ciclistas debieron cruzar Monrepós por la carretera vieja

Una Tarbes-Huesca "aventurera"
Una Tarbes-Huesca "aventurera"
S.E.

HUESCA.- La XVI Marcha Cicloturista Tarbes Huesca se celebró el pasado fin de semana para unir de nuevo las dos localidades hermanadas.

El viernes, una treintena de cicloturistas oscenses se desplazó hasta la localidad francesa, donde fueron recibidos por sus homónimos franceses, con quienes compartirían una gran jornada de cicloturismo transfronterizo.

Fue el sábado cuando al alba se juntaron los casi 50 cicloturistas, entre españoles y franceses, en el Ayuntamiento de Tarbes para realizar la tradicional foto en la escalinata y el inicio de la marcha guiados por la gendarmería francesa por las calles de la ciudad. Una vez fuera de la localidad, el pelotón se dividió en 3 grupos de 15 unidades como marca la normativa y con el fin de entorpecer al tráfico lo mínimo posible, reagrupándose cada 35 kilómetros para avituallar. En Laruns tuvo lugar una de esas paradas para iniciar el ascenso al Portalet, con sus 28 kilómetros.

Una vez alcanzada la cima por todos los participantes, tuvo lugar el momento álgido, la comida picnic de hermandad en la ladera de la montaña, con unas vistas increibles y una climatología que acompañó durante toda la jornada.

Ya por España, pedalearon por los pueblos de Biescas y Sabiñánigo hasta llegar a "La Guarguera", avituallamiento previo al paso por el puerto de Monrepós, donde los ciclistas tuvieron que optar por la ascensión por la carretera vieja, la cual está en estado de dejadez con un asfalto en pésimas condiciones, siendo casi un camino.

La autovía que une Huesca con Sabiñánigo hace imposible el tránsito de ciclistas de carretera por la zona, al tratarse de una autovía con prohibición de bicicletas y la falta de una vía de servicio por donde pudieran pedalear sin problemas. Una mejora del asfalto de la ascensión y paso del túnel de la Manzanera y la vertiente norte del Monrepós viejo favorecería el acceso a localidades colindantes y el disfrute de ciclistas, montañeros y turistas por una sierra como es Guara.

El no tener un paso fácil retrasó la marcha casi 2 horas y se llegó a Huesca pasadas las 20 horas cuando el horario previsto eran las 18:30. Fueron recibidos por familiares y amigos y rápidamente se tomaron la foto final de la marcha en las escaleras del casino. El evento se cerró con la cena de despedida en el Hotel Pedro I.