Sergio Samitier, tras correr la Vuelta a España: "Es un sueño cumplido"

HUESCA.- La Vuelta a España ha dejado muy buen sabor de boca a los tres ciclistas altoaragoneses que han participado y la han completado. Y el barbastrense Sergio Samitier tiene claro que es un sueño cumplido el haber llegado a Madrid, a la Castellana. "Es un sueño cumplido. Cuando estábamos ya en la Castellana, los tres altoaragoneses, Barceló, Arcas y yo, estábamos hablando de que hace cuatro o cinco años nadie nos hubiera podido decir que iba a llegar esa imagen. Faltó Jaime Castrillo, pero lo importante ese último día es que los tres habíamos llegado al final".

Lleva dos años como profesional, y va conociendo de qué va este mundillo, pero reconoce que una gran vuelta no tiene nada que ver. "Tienes que estar dentro en el día a día para ver que esto es otro mundo, y se podrían decir mil cosas. Son duros los traslados, que son largos y añaden mucha fatiga. Todos los días estás en sitios diferentes, no paras, no acabas de encontrarte en ninguno, y al final te pasas un mes como un nómada. Y luego está la repercusión y la gente. En cada salida y llegada había muchísima gente y se nota que es otra carrera. De hecho yo creo que no somos del todo conscientes de la repercusión que tiene todo esto y estos días ha habido mucha gente enganchada a la tele por nosotros".

En su equipo, el Murias, se puede decir que la Vuelta ha sido de nota, con victoria de etapa y presencia cada día en las fugas. "El equipo ha terminado muy contento. Para lo que somos, con los rivales y presupuestos que hay por ahí... ganar una etapa y tener tanta presencia en carrera, no se puede pedir más. Con tres o cuatro buenos corredores de alguno de los equipos más fuertes haces dos equipos enteros como el nuestro".

ESCAPADAS POR "PESADO"

Y en el plano individual, se le vio fugado sobre todo en etapas de montaña, la del Acebo, en Asturias, y en la última semana por el sistema central. "Me habían avisado de que tres semanas se pueden hacer muy largas y la verdad es que comencé un poco con el freno de mano. En la primera semana levanté un poco el pie y la verdad que en el tramo final sí que noté que tenía algo de gas. Además las fugas eran muy difíciles de coger, porque muchas parecía que iban a llegar. Y no ha habido un solo día que puedas decir que ha sido suave. Cuando no se volaba al principio para hacer la fuga, había abanicos".

En todo caso, se pudo dejar ver y es algo que le deja satisfecho. "Mis escapadas han sido por dar zapatazos, por decir "hoy sí" y ser cabezón. Así como por ejemplo Fernando (Barceló) sí que tuvo más visión de carrera y se metió en días que eran más propicios para llegar, yo lo hice en días de mucha montaña donde los de la general iban a apretar y era difícil llegar. Pero pude dar presencia. Me queda quizá esa espinita de haber cogido alguna escapada con algo más de probabilidades de terminar".

Eso sí, sus fugas en días de muchos puertos han hecho que al final termine tercero de la montaña, un premio más simbólico pero que ahí está. "El primer día que me escapé sumé unos puntos, pero estaba muy difícil. Y el segundo día dije, por si acaso voy a sumar todo lo que pueda y ya veremos. Si pasara algo y los demás se les cruza el día y no acaban, o lo que sea, ahí estoy yo".

Tiene claro además que esta primera vuelta ha sido una gran lección. "He aprendido, aunque no me hubiera escapado ni un día, y termino contento. Creo que ya se me podrán pedir cosas y éxitos más adelante, pero ahora como se suele decir, que nos quiten lo bailado".

También pudo subir al podio un día como ciclista más combativo, algo que reconoce que "le hizo ilusión" aunque también fuera un pequeño reconocimiento".

EL FUTURO, PENDIENTE DE RESOLVERSE

Cree que sobre todo con la victoria de Iturria en una etapa el Murias tiene más o menos viabilidad. "Se ve luz al final del túnel, y ese triunfo ha sido importante para seguir". Y en su caso, estos días está esperando para decidir su futuro, porque acaba contrato. "Primero hay que ver si Murias va a seguir, porque es el equipo que me ha dado esta oportunidad de ser profesional y de correr la vuelta. Pero luego hay que ver todas las opciones. Son días en que el mercado se mueve pero hay que esperar, porque primero se configuran los equipos con los primeros espadas y luego vamos los demás".

Como también reconocían Jorge Arcas y Fernando Barceló, tenía mucho que agradecer a los aficionados, de Barbastro y de su equipo. "No solo están los que han venido desde Barbastro en varias etapas. Es lo que te va llegando. El día 8 eran fiestas de Barbastro, yo estaba escapado, y la gente iba por la calle hacia los toros y se metían en los bares para ver cómo iba la etapa porque yo estaba en fuga. Sientes ese calor más o menos de cerca y es algo que te gusta. Estoy muy agradecido a todos, hasta el alcalde vino a una etapa".

Su temporada, espera, ha llegado al final por este año. "Soy el tercero del equipo con más días de competición, 74, y creo que ya toca descansar por este año".