Alba Ramírez, judoca del Club Ibón: "Había opciones de competir en Europa pero al final, nada"

HUESCA.- Dos de las judocas más representativas del Club Ibón pasan el confinamiento entre los estudios y el entrenamiento. Alba Ramírez, nombrada recientemente mejor deportista en la gala de la Asocación de la Prensa Deportiva de Huesca, lamenta el que finalmente no pueda ir al Campeonato de España cadete. "Me estaba preparando y los entrenamientos iban muy bien. Estaba a punto, y también había opciones de competir en Europa, pero al final nada. Ha sido una pena, pero para todos".

Eso sí, no ha perdido la sonrisa y sigue entrenando. "Por la mañana trabajo unas dos horas y también por la tarde. Hago pesas, ejercicios de flexibilidad, series, y también videollamadas para entrenar todos juntos. Lo llevo bien y casi ahora me noto más fuerte".

Anímicamente también lo lleva bien. "Estaban siendo meses muy intensos con entrenamiento y competición sin parar, y ahora al menos hay algo de descanso. Pero todos tenemos muchas ganas de volver. Lo mejor ahora es que el contacto con las compañeras y con toda la gente del club es muy estrecho".

En los estudios, cree que no volverán a clase y cumple con los trabajos que le mandan y las clases online, con la suerte además de que sus padres le pueden echar una mano. Hablando de sus padres, su padre le montó una press banca casera con baldosas y una nevera. "Quería hacer cosas y estaba un poco agobiada, y mi padre, qu es muy mañoso, cogió una tabla, la colocó sobre unas baldosas apiladas y una nevera y me la montó. También tengo la suerte de que como tenemos jardín puedo hacer algo más de ejercicio".

Y en el caso de Raquel Miret, esta cancelación de la temporada le ha llegado en su último año de cadete y con grandes objetivos por delante. Sobre los estudios señalaba que sin contacto con profesores y compañeros es más difícil, pero que con internet van haciendo. En cuanto al ejercicio, entrena duro. "Como vivo en un pueblo tengo más espacio, pero está claro que no es como estar en el gimnasio. Además es un deporte de contacto, y al no tener compañeros muchas cosas no se pueden hacer, pero me apaño con el material del club que me dejaron y con series de ejercicios, además de con los entrenamientos conjuntos que hacemos por videollamada".

Lamenta las competiciones que se ha perdido, pero mira hacia adelante. "Tenía la ilusión sobre todo en el Campeonato de España, porque es mi último año de cadete y tenía posibilidades de medalla. No sé si se podrá aplazar y podré participar, y lo mismo con pruebas internacionales. También era una buena preparación para empezar al año siguiente como junior, pero de momento es mejor no pensar mucho en eso. La situación no es fácil, y menos cuanto más se alarga, pero creo que todos la vamos llevando bien. Yo al menos puedo pasear al perro todos los días y eso también ayuda".