Nico Usieto o pilotar casi antes que caminar

Es lógico que las aficiones se hereden, también aparecen sin explicación, se supone que se lleva en la sangre y cuando tu hijo llega a pedirte su primera moto, lo dice de verdad, y los padres se dan cuenta de que no es un capricho.

Nico Usieto tiene 8 años y lleva en el mundo de las motos desde los 4. “Le encantan, está federado desde los 6 años y el pasado año ya compitió en dos carreras y ha comenzado este año compitiendo en el Motocross Trofeo Villa de Zuera y el día 19 lo hará en Monzón”, explican sus padres, Alex y María Jesús.

Nico tiene una Husqvarna TC 50, una gran moto para los pilotos más pequeños, los que se inician en el mundo del motocross y requieren una montura similar a la que utilizan los pilotos más mayores, siendo su principal característica el uso de embrague automático, que permite preocuparse únicamente por la conducción y olvidarse de la caja de cambios y del embrague.

Una vez los padres de Nico tomaron la iniciativa de meterse en este mundo, porque se trata de un deporte que conlleva ciertas renuncias, han ido a por todas. “Se mezclan los sueños de nuestro hijo con los nuestros, que son muy compatibles”, detallan, aún sabiendo que hay mucha competitividad, “pero también hay mucha deportividad, compañerismo y todo ello influye en su personalidad y su fortaleza mental, pero sin olvidar que es una persona que se está formando y a la que hay cosas que todavía no le podemos exigir. Nunca debemos olvidar que debajo de ese mono y ese casco se esconde un niño. Con sus miedos y sus inseguridades, pero también con la ilusión propia de quien tiene toda la vida por delante”, opinan los progenitores.

Exigencias económicas y renuncias

La familia también sabe que se le vienen encima una serie de esfuerzos por parte de toda la familia porque, al margen del material, hablamos de las licencias para competir, desplazamientos e involucración por parte de todos, sin olvidar que el menor debe seguir con sus estudios, dejándole claro que las carreras solo son compatibles con unas notas aceptables. “En el colegio va muy bien y realiza sus entrenamientos en el Moto Club Monzón con el entrenador y presidente del club, Óscar Romero”, además de contar con un mecánico profesional de confianza como es Carlos Pérez.

La segunda carrera del año, en el club de casa

Así, el próximo día 19 de febrero, el próximo domingo, Nico va a competir, en la categoría de alevín, en Monzón en el Campeonato de Aragón de Motocross. Las pruebas, en sus diferentes categorías, cuentan con la participación de un centenar de pilotos. El Moto Club Monzón ha remodelado el circuito para que resulte más atractivo a los espectadores y durante estos fines de semana los pilotos ya han podido entrenar.

Desde estas líneas deseamos a Nico mucho éxito y si todas las profesiones requieren de esfuerzo y dedicación, pocas como esta tienen tan fina la línea entre el éxito y el fracaso, recordando que cuando se habla de los grandes pilotos de la historia coincide en lo mismo: su enorme fortaleza mental. No es algo que se consiga con un chasquido de dedos. Seguramente Nico ya ha empezado a trabajar desde el día que, con 4 añitos, dijo: “Mamá, papá: quiero ser piloto de motos”.