Sergio Samitier: "El nuevo ciclismo no permite fallos"

Dentro del boom de ciclistas profesionales altoaragoneses, un buen ejemplo es el barbastrense de Movistar Sergio Samitier. Cumple su sexto año como profesional, todo un veterano en estas lides que comenzó una nueva temporada en febrero en Australia y que, precisamente esta semana, ha brillado con luz propia en el Tour de los Alpes con grandes actuaciones.

El día de Aragón, como otros muchos festivos, lo ha vivido poco, casi siempre disputando pruebas por todo el mundo. “No lo he podido disfrutar mucho, porque me pilla casi siempre compitiendo. Pero sí que sirve para recordar las raíces, de las que estoy orgulloso. Me gusta decir que soy de Barbastro, y no me gusta nada cuando me llaman maño”.

Orgullo de su tierra, y así como otros compañeros de oficio pueden tener problemas para entrenar todo el año, Sami saca pecho. “Los que viven en Andorra en invierno no pueden entrenar por la nieve, y los del País Vasco todo el día lloviendo. En Barbastro tenemos como un microclima y puedes estar todo el año entrenando sin tener que moverte. Es una suerte. Cada año pasamos de media 90 días de competición y 40 de concentración más viajes etc, así que es bueno poder estar y entrenar en casa”.

Arrancó en Australia casi a principio de año, y la temporada de momento va bien, aunque siempre quiere más. “Estoy contento con la progresión. Estaba parado desde agosto y cuesta arrancar. Además como el calendario no es fijo tienes que estar alerta y concentrado todo el tiempo. Esta temporada todavía no he tenido tiempo de hacer una concentración en altura y voy adaptándome al calendario. Lo siguiente será Vuelta a Asturias y, si luego no voy al Giro, espero poder hacerla. El calendario es fijo pero luego cambia porque hay muchas variables, e incluso entre los compañeros nos cambiamos pruebas”.

Al final de la temporada pasada se cayó y se rompió la clavícula. “Por ir rápido la puedes liar y tratamos de hacer las cosas bien. Paré antes por la lesión y este año he empezado antes, sin prisa”.

Y señala que el ciclismo cada vez se ha vuelto más exigente. “Tienes que adaptarte a llevarlo todo a rajatabla, a pesarte la comida, es un nuevo ciclismo que te puede gustar más o menos, pero no queda otra y no se permiten los fallos. Intento ser un ciclista polivalente”.

Y con contrato en Movistar también el año que viene, de momento no mira más allá. “Creo que soy un ciclista de grandes vueltas, es lo que me gusta, y si el equipo me lleva a las grandes pruebas, que es lo que quiero, perfecto. Si no, ya veremos”.