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BALONMANO/ASOBAL

Cordiés: “Ha sido una experiencia muy bonita”

El cubano, feliz tras el triunfo en la Copa de Naciones Emergentes de la IHF

Los hermanos Cordiés, Samuel y Frank, con el trofeo conseguido en Bulgaria con Cuba.
Los hermanos Cordiés, Samuel y Frank, con el trofeo conseguido en Bulgaria con Cuba.
S. E.

Frank Cordiés se incorporó este mates a los entrenamientos del Bada Huesca, después de conseguir con Cuba el Campenato de Naciones Emergentes de la IHF, que se disputó la semana pasada en Bulgaria. Cuba se llevó el título tras ganar a Chipre (28-18) en la final y antes eliminar a la anfitriona y favorita, Bulgaria (36-29). Y antes a Gran Bretaña y Guatemala.

Cordiés explica que ha sido “una experiencia muy bonita. Íbamos con el objetivo de igualar o mejorar el resultado de 4 años antes, cuando perdimos la final con Georgia en su casa. Siempre que se gana con tu selección y representando a tus colores es un alegrón”, dice. Además, ha compartido equipo con su hermano Samuel, al que ha visto muy bien.

Cuenta que este torneo “para Cuba supone un plus para motivar a los muchachos que vienen. La generación que tenemos es la que vamos a llevar a las competiciones que vienen y la media de edad es de 23 años. Tenemos mucho que aprender y progresar como jugadores, pero tenemos ambición de crecer”.

Él ha cumplido un papel de “guiar a los que vienen nuevo y no están jugando fuera y ayudarles un poquito” y es que hay muchos jugadores que siguen en Cuba “no han tenido oportunidad de salir y ojalá les llegue su momento”. Ese torneo puede servir para abrirles puertas en Europa, pues en Cuba se limitan a entrenar, pero no compiten.

Cordiés tenía “más el rol de defender en el medio y ayudar ahí. En ataque, ir viendo qué pasaba”. Y comenta que la portería del equipo estuvo “muy bien. Tenemos dos guardametas espectaculares”.

Cordiés cuenta que el comienzo de la competición fue complicado. Los cubanos que llegaban desde Europa llegaron diez minutos antes del partido con Gran Bretaña por un problema de enlaces en los vuelos. Y los británicos “un gran equipo y al que se veía organizado” les complicó. Pero según avanzaba el torneo se sintieron cómodos.

El duelo más duro fue con Bulgaria. Cordiés señala que tenía que haber sido “la final. Era en su casa y era el más fuerte”. Después cuenta que la final con Chipre “fue algo más sencilla. Venían a dejarlo todo, pero sabían con quien jugaban. Lo intentaron y nos pusieron en apuros, pero nos salieron cosas”

Y respecto a su papel en Bada, dice que ha “cogido confianza poquito a poquito y se ha notado en esta segunda vuelta. Me lo he propuesto y van saliendo las cosas”.