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24 cordadas llenan Los Mallos de color

El Rally Doce Horas de escalada de Riglos ha vuelto a mostrarse como una cita ineludible para los amantes de este deporte

Foto de familia en la salida del Rally de Escalada.
Foto de familia en la salida del Rally de Escalada.
S. E.

El decimotercer Rally Doce Horas de Escalada de Riglos ha vuelto a demostrar que es un acontecimiento imprescindible para los amantes de la escalada de grandes paredes.

El pasado sábado, la prueba -organizada por Peña Guara y la Federación Aragonesa de Montaña- atrajo a algunas de las mejores cordadas de Asturias, País Vasco, Andalucía, Madrid, Comunidad Valenciana, Navarra, Cataluña y Aragón.

El Rally de Escalada de Riglos es la tercera prueba de la Liga de Rallyes “doce horas de escalada” +8000 en la que también están integrados los Rallyes de La Cabrera (Madrid) y el Peñón de Ifach (Alicante), celebrados en fechas anteriores, y el próximo Rally de El Chorro, en Málaga.

Sin embargo, la menor cantidad de horas de sol y la necesidad de dejar un margen de día para que las cordadas pudieran descender de los mallos con seguridad hizo que la organización decidiera reducir la duración de la prueba a diez horas.

Un día magnífico y victoria navarra

Después de varios días de intensas lluvias amaneció un magnífico día para la escalada, fresco y soleado. A las ocho de la mañana se dio la salida desde el refugio de Riglos a las 24 cordadas que durante las siguientes diez horas llenaron de color las paredes de Los Mallos en un subir y bajar por las paredes en busca de conseguir acumular el máximo de puntos. El numeroso público que acudió a visitar Riglos y su increíble paisaje pudo disfrutar con esto de un magnífico espectáculo de escalada.

Como en otras ocasiones, el duelo entre las mejores parejas y sus diferentes estrategias duró hasta el final, aunque pronto destacó la cordada navarra formada por Daniel García de Eulate y Egoitz Egozkue, que ya vencieron en la última edición del Rally de Riglos. Después de escalar el Pisón por las vías Tucán y Pájaro y la Visera por la difícil Popeye, remataron su participación escalando La Fiesta de los Biceps de La Visera. Así, dejaron sin opciones a sus perseguidores alicantinos, la cordada formada por Roy de Valera y Antonio Seguí.

Cuando solo quedaban unos minutos para finalizar, todavía algunas cordadas no habían terminado su última vía y mantuvieron en vilo al público asistente en un emocionante sprint para escalar a tiempo los últimos metros.

Este año también se presentó una novedad, el Reto Aragón. Es una actividad no competitiva que consiste en escalar tres mallos pequeños; el Colorado, el Cored y la Aguja Roja, por vías seleccionadas entre varios niveles de dificultad en un tiempo de ocho horas. Cada cordada acepta y diseña su propio reto, y obtiene como premio un recuerdo con el distintivo Oro, Plata o Bronce según haya escalado tres, dos o un mallo.

Al anochecer se celebró la entrega de premios y el sorteo de regalos. Se clausuró el Rally con una cena en la que el mejor plato fue el magnífico ambiente donde todos prometieron volver para la próxima edición de esta fiesta de la escalada.