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El Peñas cae contra Ponferrada en un partido loco (72-63)

Los altoaragoneses han llegado a igualar un encuentro en el que estuvieron 20 puntos por debajo, pero los locales han gestionado mejor los ataques

Stumer en el partido contra el Ponferrada.
Stumer en el partido contra el Ponferrada.
S. E.

Cae el Peñas en su primera cita de 2024 ante el Ponferrada (72-63). Ha sido un partido loco, con poco control y en el que los altoaragoneses han conseguido remontar 20 puntos de desventaja, pero la mejor gestión local ha terminado decantando la balanza.

Salía frío el Peñas encajando un 6-0 inicial, aunque ha podido igualar gracias a la muñeca de Stumer. Primero dividía la zona Nogués para dejarle liberado, y después con un lanzamiento contestadísimo ponía el sueco el empate a seis en el marcador.

Pero el equipo berciano corría, circulaba y defendía con una marcha más. También cargaban el rebote mejor, un auténtico mal de cabeza para los de Rafa Sanz en la primera parte.

Ponferrada conseguía un parcial de 12-0, y se gustaba con alley-oops que levantaban el pabellón. Todo lo malo se acaba, y el Lobe Huesca ha roto el demoledor parcial con un triple desde la esquina de Scariolo. Suerte de esos fogonazos individuales, ya que en la jugada siguiente volvía a anotar desde la media distancia para cerrar el cuarto con 20-11.

En el segundo cuarto, pese a que finalmente lo consiguiera maquillar el conjunto de Rafa Sanz, el Ponferrada ha pasado por encima de los altoaragoneses.

Moncanut, el base berciano, mandaba, asistía y anotaba como quería. También mandaban sus interiores bajo los tableros, que en una jugada consiguieron hasta tres rebotes ofensivos consecutivos. Por suerte para el Peñas, Rubin ha encadenado dos triples para mantener a los suyos a doce puntos (27-19).

Nada de esto bastaba. El acierto visitante no llegaba, mientras que el Ponferrada anotaba cómodamente jugando un muy buen baloncesto. Así, puso un nuevo parcial de 10-0 el equipo blanquiazul, que solo pudo romper Chapero con un tiro libre (37-20).

El final del cuarto ha sido un auténtico intercambio de golpes. El Peñas flirteaba con besar la lona al situarse con una desventaja de 20 puntos (42-22), pero dos triples finales de Bellver –el último, espectacular y sobre la bocina- mandaban a los equipos a vestuarios con 46-32.

Todo el acierto que había tenido el Ponferrada lo ha empezado a perder tras la reanudación. Le costaba anotar a ambos equipos en un inicio trabado, aunque con cinco puntos consecutivos los locales se ponían 17 puntos por encima (55-38).

A partir de aquí, la reacción peñista ha sido espectacular. Ha conseguido un parcial de 0-12 liderado por Stumer y Scariolo. Especialmente el segundo se echó al equipo a la espalda con canastas cayéndose y triples inverosímiles, y solo un tiro libre local cortó el parcial (56-50).

Ha comenzado el último cuarto como terminaba el anterior. Entre Stumer y Chapero llegaron los puntos que igualaron el partido (56-56), aún con muchos minutos por jugar. El interior ha tenido la oportunidad de adelantar a los altoaragoneses, pero erró el tiro adicional y la victoria se alejaría.

En gran medida, la culpa la tuvo Merlo, que ha roto el último cuarto con 10 puntos y situaba el 68-58. Quedaba todavía la mitad del cuarto por jugarse, pero el electrónico se movió poco hasta el 72-63 final. Ambos equipos trataron de recuperar o mantener el average, que finalmente queda favorable al Peñas por cosechar en Huesca una ventaja de 12 puntos.