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Huesca La Magia, ante todo un reto en la Liga Nacional de Clubes

El equipo arranca y estrena categoría, la Primera Oro

Bergua, tercero por la izquierda, Isábal, quinto y Gállego, séptimo, durante la concentración en el CAR.
Bergua, tercero por la izquierda, Isábal, quinto y Gállego, séptimo, durante la concentración en el CAR.
FESBA

El equipo Huesca La Magia de bádminton arranca este fin de semana en Ourense la Liga Nacional de Clubes, una competición en la que estrena categoría y se encarama al segundo escalón del bádminton nacional, un reto más que exigente en el que el objetivo claro es la permanencia.

El primer equipo oscense terminó el año pasado cuarto en la categoría de Plata, pero uno de los ascendidos era filial, y su primer equipo bajó de División de Honor a Oro, y el tercero renunció al ascenso. De este modo los oscenses se han encontrado con un ascenso a Primera Oro, la segunda categoría nacional. Un reto complicado del que esperan salir bien parados.

En Primera Oro hay doce equipos y se jugará una liguilla a una vuelta repartida en cuatro fines de semana, entre enero y abril. Los dos primeros al final suben a División de Honor y los dos últimos bajan a Plata.

Como explicaba Roberto González, responsable del equipo, “el objetivo número uno es mantener la categoría. Va a ser muy complicado porque este nivel es muy exigente, los equipos se refuerzan con jugadores internacionales y tendremos que luchar mucho para no ser uno de los dos últimos. Ha sido una suerte conseguir este ascenso, pero el año pasado ya nos quedamos cerca e hicimos méritos y vamos a tratar de aprovechar este premio”.

El equipo este año mezcla jugadores del club y varios fichajes extranjeros. Entre los chicos están los tres mejores jugadores oscenses, aun Sub 17 pero ya con un nivel muy alto nacional e internacional: Raúl Bergua, Alejandro Gállego y Gonzalo Isábal, además del propio Roberto González. Para apuntalar el equipo se ha fichado a dos ingleses, Zachari Bobrowski y Ben Jarvis.

Y entre las chicas, siguen Cristina Roig, Lucía Azpeitia y Raquel Miguens, y llegan la ucraniana Raiia Almalalha y las británicas Tashvi Parab y Magda Lozniceriu.

“Es una mezcla entre nuestros jugadores de casa y varios fichajes extranjeros. Pero se irán repartiendo durante la temporada porque la base va a ser la de los jugadores de casa. Se trata de que nos den ese salto de calidad para alcanzar el objetivo de la salvación”.

De hecho, en Ourense el equipo estará formado por Isábal, Gállego y Jarvis en chicos y Roig, Azpeitia y Almalalha en chicas.

Además, el hecho de que los tres jóvenes valores oscenses vayan a disputar este año de nuevo el Circuito Europeo, en busca de clasificarse tanto para el Europeo como para el Mundial de su categoría, hará que sean baja en alguna de las cuatro fechas programadas, una por mes, por lo que el segundo equipo, en Liga Catalana, también estará para reforzar en caso necesario.

Y en esta primera jornada, sus rivales son Benalmádena y Oviedo B el sábado y Universidad de Valladolid el domingo. “Benalmádena ha bajado de División de Honor después de muchos años, y Valladolid es el otro descendido. Va a ser un comienzo de liga muy duro por esos dos rivales, y Oviedo es un filial pero que también tiene mucho nivel. Vamos a ver si conseguimos una victoria. La liga va a estar muy igualada y serán muy importantes los detalles y, en las derrotas, que sean lo menos abultadas posible”.

Concentración en Madrid

Por otra parte, durante toda la semana los jugadores oscenses Raúl Bergua, Alejandro Gállego y Gonzalo Isábal han participado en el CAR de Madrid en la semana de trabajo del Centro Nacional como deportistas en seguimiento de categorías Sub 19 y Sub 17 por parte de la Federación Española. Por medio de esta concentración se da un paso más en el objetivo de que el Centro Nacional abra sus puertas a los principales talentos del bádminton español para compartir la metodología que se desarrolla desde la federación.