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EXCURSIONES

Circular al Pusilibro desde el castillo de Loarre

Más de 15 kilómetros, con 650 metros de desnivel acumulado, en unas seis horas de recorrido con descansos.

Grupo de excursionistas con el castillo de Loarre al fondo.
Grupo de excursionistas con el castillo de Loarre al fondo.
Carlos Bravo Suárez

El pasado domingo, el Centro Excursionista Ribagorza organizó una excursión desde el castillo de Loarre, en La Hoya de Huesca, con ascensión al pico Pusilibro, de 1595 metros de altitud y máxima elevación de la sierra de Loarre. Fue un recorrido circular con ascensión al pico por la cresta oriental y descenso por la occidental y la ermita de Santa Marina. En un día de temperaturas algo más frías, pero muy agradables para la práctica del senderismo.

Los veintiocho participantes en la excursión, procedentes de diferentes lugares de la zona, se citaron en el parking del castillo de Loarre. Desde allí, a las 8:30 horas se dio inicio a la caminata. Con magníficas vistas del extraordinario castillo medieval a las espaldas, se inició el ascenso al pico Pusilibro, por un sendero bien señalizado que transita entre bosque de pinos y bojes. Tras cruzar varias veces una pista con algo de viento, se giró a la izquierda para dirigirse hacia el pico por su cresta oriental. En dirección al norte, y tras un corto tramo, se llega a la cima del pico, marcada con un vértice geodésico cilíndrico. Desde allí, se pueden divisar extraordinarias vistas de toda la cornisa pirenaica, con sus picos nevados.

Después de un receso para un tentempié, se toma el camino que discurre por el Portillo Chara y lo alto de la cresta occidental de la sierra de Loarre, hasta desembocar en una pista en el llamado collado de las Antenas. El camino continúa por la pista entre frondosos bosques y algunos claros de prados verdes, con estupendas vistas, en algún momento, del pantano de La Peña. En la ermita de Santa Marina y el refugio del mismo nombre, se pueden contemplar extraordinarias panorámicas, ahora de la Plana de Huesca, con poblaciones como Aniés, Bolea, Loarre y Ayerbe y las aguas del pantano de La Sotonera hacia el horizonte.

Ya en dirección al este, se marcha hasta llegar de nuevo al castillo de Loarre, contemplado un poco antes desde un rocoso y escarpado mirador. En total, un recorrido de algo más de 15 kilómetros, con 650 metros de desnivel acumulado, en unas seis horas con paradas y disfrutando de un magnífico día de excursionismo.