Bada Huesca busca reacción en Logroño

El Bada Huesca visita al Logroño este viernes (20:00 horas), trata de pasar página de su mal comienzo liguero de la semana pasada contra el Valladolid y de conseguir los primeros puntos. No le resultará sencillo, pues la de Logroño es una de las pistas más complicadas de la categoría. Muestra de ellos es que el Bada no ha ganado nunca allí en sus enfrentamientos en Asobal, pese a sus once visitas. 

Los oscenses llegan con el mismo problema de bajas de la semana pasada, debido a las ausencias de los extremos zurdos Gerard Carmona y Charly Pérez y de los centrales Óscar García e Ignacio Suárez. Pero esta vez lo hacen con tiempo para haberlo asumido y preparado y dispuestos a ser competitivos.

Para ello, el técnico José Nolasco apelaba en su intervención previa al partido a la importancia de la defensa. Las lesiones apenas afectan a la parcela defensiva y, por ello, es más importante que nunca. Además, el equpo va a necesitar frenar al rival y poder correr al contraataque para aumentar sus opciones de éxito.

Contra Valladolid la defensa del juego posicional pucelano no estuvo mal, pero toca dar un paso adelante en esta ocasión y que se vea su mejor versión, junto a la de la portería.

Y es necesario mejorar en ataque. Las pérdidas de balón fueron un lastre en el estreno liguero y deben reducirse al mínimo ante un equipo que tiene mucha capacidad para correr y que castigará tanto o más que los pucelanos los errores en ese sentido del Bada Huesca.

Los oscenses necesitan explotar sus virtudes y ello pasa también por la paciencia para construir situaciones más favorables y no realizar lanzamientos precipitados, que puede ser una tentación cuando se tienen laterales con buen brazo como los oscenses.

El Logroño tiene un equipo fuerte, con mucho lanzamiento con jugadores como Thiago Ponciano, Zaja o Rivero, pero también mucho uno contra uno en esos mismos o el El Korchi o Edu Cadarso. Además, juega mucho con el pivote. Y defensivamente tiene un bloque duro y físico, que exigirá el máximo de los oscenses.