Fútbol

Copa del rey

El Barbastro roza la heroica en un partido para el recuerdo

Los de Dani Martínez cayeron de manera más que digna por 2-3 contra el Barcelona, en un duelo que no se decidió hasta los minutos finales

De Mesa fue uno de los fgoleadores de la noche.
De Mesa fue uno de los fgoleadores de la noche.
Verónica Lacasa

El Barbastro cayó este domingo con orgullo ante el FC Barcelona por 2-3 en dieciseisavos de Copa del Rey. Un partido que tuvo emoción y muchos goles, y que no se decidió hasta los últimos minutos del encuentro. De Mesa y Prat fueron los goleadores de la noche, en un partido de ensueño que quedará siempre para la historia de Barbastro y de la ciudad, pues David casi pudo con Goliat.

No hubo tregua alguna desde el primer minuto de partido, y así se lo quiso demostrar el Barcelona al Barbastro en todo momento. No obstante, el equipo de Dani Martínez no dudó en ponerse el mono de trabajo para achicar agua en la medida de lo posible, aunque no fue fácil.

No tardaron los visitantes en tener la primera ocasión clara del partido. Ferran, en el minuto 5, gozó de un mano a mano ante el que Arnau se hizo grande, y adivinó su disparo. Raphinha, en segunda instancia y con el meta altoaragonés adelantado, probó a picarla para hacer el gol inicial, aunque se le fue alto.

Trató de responder el Barbastro, que buscaba tener su oportunidad a través de centros laterales, pero la defensa blaugrana no parecía tener intención de flaquear. Y eso le dio mucha fuerza al equipo de Xavi, que tuvo la segunda ocasión rondado el minuto 10, por medio de un potente disparo lejano de Oriol Romeu que se marchó fuera por milímetros.

Como era de esperar, el peligro del Barbastro y sus ocasiones brillaron por su ausencia durante los primeros minutos del encuentro, mostrándose el equipo consciente de que esta noche no iba a ser un camino de rosas sino todo lo contrario. Pero no hubo miedo a caer.

Defender y rechazar era, por el momento, la única misión de los locales, pero cada vez se complicaba más. Arnau, por tercera vez en tan solo 15 minutos, salvó a los suyos gracias a sus reflejos. El meta estuvo atento para despejar desde el suelo y con los pies un disparo de Joao Felix que iba dentro de la portería al ser desviada su trayectoria por el toque en Mingotes.

Aún así, no tardó en llegar el gol del FC Barcelona. Fermín hizo el primero de la noche en el minuto 18 gracias a un pase lateral y raso de Raphinha desde la banda derecha. Prácticamente desde el interior del área y de primeras, batió a Arnau, que ya no pudo hacer más.

No decayó el ánimo en el Municipal, que aunque veía que su equipo ya iba por detrás en el marcador no dejó de animar a los suyos. Todo ello también a pesar de que al equipo le estaba costando un mundo salir de su campo. Eso sí, mientras el resultado fuese tan corto, cualquier cosa podía suceder todavía en el feudo rojiblanco.

El dominio blaugrana era total defensiva y ofensivamente hablando, mientras que el Barbastro aguantaba a pesar de sus limitaciones. Y eso parecía bastarle para algún despiste de los de Xavi, que estuvo a punto de encontrarlo por medio de Gascó. El defensa rozó con la yema de los dedos un mano a mano, pero Romeu le arrebató la posibilidad cuando parecía tenerlo hecho ante Peña. Poco después, De Mesa tuvo el primer disparo local por medio de un saque de banda largo, aunque no encontró portería.

Y los minutos pasaban mientras que el Barbastro apretaba dientes, aguantando las embestidas rivales de Raphinha y Fort, muy peligrosos y constantes quebraderos de cabeza para Franky y Bautista. Incluso se libró del segundo, ya que el línea consideró que Joao Felix estaba en posición antirreglamentaria en el momento que cabeceó el balón a las mallas.

Pero a pesar de todo ello, Barbastro y Barcelona se marcharon a vestuarios con un resultado muy corto para lo que se vio. Un hecho que podía dar esperanza a los de Dani Martínez de cara a la segunda mitad.

Tras la reanudación, no tardó Dani en mover el banquillo. Retiró a Bautista y metió a Soule, y nada más comenzar pareció funcionarle. Tras una jugada que comenzó el atacante por banda derecha, Gonpi gozó de un disparo franco desde la frontal del área, el cual Iñaki Peña atrapó sin problemas.

Así, parecían soltarse los locales ante un Barcelona que necesitaba poco para generar miedo. Todos los balones a Soule, quien ya se encargaría de, como mínimo, incordiar a la defensa blaugrana por el flanco derecho.

Pero poco duró el optimismo, pues Raphinha anotaría el segundo de la noche en el minuto 50. Fort encontró al brasileño en un centro muy medido al segundo palo, donde solo tuvo que empujarla. La cosa se ponía cuesta arriba para el conjunto altoaragonés, con pocos recursos para hacerle frente a un Barcelona que no se guardó nada.

No le importó a los de Dani, e insistieron por todos los medios para ganar metros y buscar el error en defensa. Con poco que perder y mucho que ganar adelantó líneas el Barbastro, decisión que les favoreció para tener algún que otro acercamiento de cierto peligro. Y surtió efecto de la manera más deseada por todos: con el gol de la ilusión.

Adriá De Mesa recortó distancias en el minuto 59, momento en el que aprovechó un barullo a la salida de un córner para empujarla a placer. El Municipal estalló de júbilo como no podía ser de otra forma, y al grito de ‘Sí se puede’ transmitió a los jugadores que hacer la machada no era imposible.

Fue a más el Barbastro, pero tuvo que volver a pasar momentos complicados para seguir con vida. Gracias en parte a Arnau, que tuvo que exigirse al máximo para realizar un auténtico paradón al remate de cabeza de Koundé en un saque de esquina.

Pasaban los minutos y los locales, que habían cogido aire con la entrada de Requés y Crespo, olían la sangre de un Barcelona que pasaba por su peor momento en el encuentro. Ahí estaba la posibilidad de hacer algo histórico, pero iba a costar sangre, sudor y lágrimas. Más si cabe tras los últimos cambios de Xavi, que metió toda la carne en el asador con Lewandowski, Gündogan y Sergi Roberto.

A falta de 15 minutos para el final, estaba todo por decidir con un 1-2 que podía variar en cualquier momento. Y los locales lo sabían. Volvieron a adelantar líneas, se plantaron en campo contrario y tuvieron una ocasión clarísima para hacer el empate. Mingotes remató un centro posterior a un córner, aunque realmente forzado para darle trayectoria al cabezazo.

El partido no era apto para cardíacos, y Arnau tuvo que volver a calmar tensiones hasta en dos ocasiones. Con dos mano a mano consecutivos a Roque y Lewandowski que levantaron al público barbastrense. 

Sin embargo, el desenlace no fue el que Barbastro esperaba. Lewandowski hizo el tercero y prácticamente definitivo en el minuto 88, de penalti por manos en el área.

A pesar de ello la fiesta no terminó en el Municipal, pues Prat hizo el 2-3, también de penalti, pocos minutos después. 

El Barbastro lo peleó y lo intentó hasta el final, pero no pudo ser. El resultado es lo de menos, pues lo de Dani Martínez han caído de manera elegante, compitiendo con orgullo y poniendo contra las cuerdas al equipo de Xavi. Una eliminatoria para el recuerdo, en la que siempre se tendrá en cuenta que el Barbastro rozó la heroica.