Josete Ortas: "El club ha sufrido mucho en un verano muy duro"

HUESCA.- Del sufrimiento extremo al suspiro de alivio. De perder seis kilos en dos semanas a empezar a recuperar peso tres meses después. El director general del Huesca, Josete Ortas, habla para DIARIO DEL ALTOARAGÓN del que seguramente ha sido su verano más duro. Del sobresalto que supuso la Operación Oikos, que hizo tambalear los cimientos, hasta los momentos de inflexión a los que se agarró la entidad para remontar el vuelo y acudir a la línea de salida de la competición liguera con una plantilla de garantías dispuesta a iniciar la lucha por volver a ser de Primera.

En ese relanzamiento, y dentro del carrusel de emociones que ha vivido el club, Ortas pone en valor la abrumadora respuesta de la afición -con más de dos mil seguidores sin poder sacarse abono-, el "cien por cien" del apoyo de empresas y patrocinadores que renovaron su compromiso y el espaldarazo que supuso el "sí" de tres jugadores como Mikel Rico, Mosquera y Juan Carlos que propiciaron un "efecto contagio" para verificar que el rearme del Huesca iba en serio y tenía solidez y solvencia.

"Sí que he sufrido. Estar el club en boca de todo el mundo y ser portada de todos los medios, a nivel nacional e internacional, por un tema tan desagradable, ha sido muy duro. El club ha sufrido mucho con este tema porque al final el perjudicado es el Huesca y la imagen que sale manchada es la de la entidad", afirma el director general.

No obstante, el panorama se va despejando poco a poco merced a la capacidad de gestión que siempre ha acompañado al club. "Siempre hemos confiado en que aquí se han hecho bien las cosas", señala Josete Ortas, quien no quiere adelantarse a los acontecimientos y se muestra cauto y respetuoso con la actuación de la justicia. "Ahora estamos en un proceso de instrucción que hay que respetar y de ayudar en todo lo que podamos. Y cuando esto acabe, el club tiene los mecanismos suficientes para salir indemne. Vamos a confiar en que todo se ha hecho bien y en el trabajo de la policía, de los jueces y de toda la gente que está en la investigación".

Admite que el primer mes "nos costó mucho tomar el pulso a todo" pero asegura que ni LaLiga ni ningún otro organismo han sido recelosos con la actuación del Huesca. "En el momento en que empezamos a fichar y económicamente pudimos hacer alguna operación que nos diera oxígeno, como fueron los traspasos de Melero y Enric Gallego, recobramos una cierta normalidad y el club empezó a funcionar bien", señala como el primer momento para recuperar la sonrisa.

Después llegó la respuesta de la afición, que pese al descenso y a la Operación Oikos respondió en las renovaciones de los abonos en un 98% y abrió una lista de espera con 2.600 aficionados, de los cuales solo 200 pudieron beneficiarse para obtener asiento en El Alcoraz. "El que la gente no de la espalda al club y siga apoyando, apostando y sintiéndose de la SD Huesca, es un motivo de alegría, de empuje y de ayuda. El campo se está llenando, estamos teniendo las mismas peticiones que el año pasado y si tuviéramos dos o tres mil localidades más las tendríamos cubiertas los fines de semana".

Y el próximo domingo habrá en Soria más de un millar de aficionados que lo corroboran. "Es un motivo de orgullo ver que la gente se engancha al equipo. Estamos muy agradecidos a la afición".

Entre tanto, se fue construyendo la plantilla en un mercado muy complicado y con futbolistas que se resistieron a fichar. "El momento de inflexión en el mercado es cuando vienen Juan Carlos, Mosquera y Mikel Rico, que eran tres jugadores a los que todo el mundo quería. Cuando ven que vienen al Huesca eso nos da cierta credibilidad y ven que realmente vamos a hacer un buen equipo. A partir de ahí van llegando jugadores que eran primeras opciones para la dirección deportiva y para el entrenador. Estamos contentos con el resultado de la plantilla".

El resultado se está viendo en el arranque liguero. "La temporada ha empezado bastante bien, lo digo entre comillas porque esta liga es muy larga y muy igualada. Pero habiendo jugado contra rivales de entidad, el equipo ha competido y se ha logrado hacer una plantilla buena y eso a la gente le da motivos de esperanza".

Entre los aficionados se comparte la opinión-impresión de que el Huesca tiene mejor plantilla en Segunda que la pasada campaña en Primera. "Es posible, sobre todo yo creo que hay una plantilla más compensada y más larga y con muchas más opciones para el entrenador. Es probable que este año no tengamos jugadores que el anterior teníamos (dos o tres casos)".

También se ha logrado un récord de ingresos por ventas (alrededor de 11 millones entre Enric Gallego, Melero y Gallar), además de los 4 que deben llegar por la resolución del "caso Goddos". "Lo de Gallar, Enric y Melero ha sido una inyección tremenda porque nos veíamos un poco bloqueados a nivel financiero y nos ha ayudado muchísimo. En el tema de Goddos, siempre confiamos en que era un tema que teníamos bien estructurado. El chico vino aquí, firmó contrato y el club nos dio el ok. El código suizo, que es el que rige este tipo de operaciones porque la Cámara de Disputas y Resoluciones de FIFA se encuentra en Zurich y la legislación es muy clara cuando dice que en el momento en que el club da el ok el contrato ya está conformado. También teníamos indicios porque los mismos clubes, Ostersund y Amiens, intentaron antes de que saliera la resolución ofrecernos dinero para retirar la demanda y eso era un indicativo de que no tenían la razón de su parte".

La tercera pata del banco fue la renovación de empresas y patrocinadores y Josete Ortas agradece "el apoyo al cien por cien" de todas ellas y desvela que "les dimos la opción de romper el vínculo si por este tema se podían sentir incómodos. Lo podíamos entender perfectamente. Nadie se quiso acoger a esta posibilidad y todos renovaron el patrocinio".

No ha sucedido lo mismo con las entidades financieras. "Sí es verdad que este verano nos han dado un poco la espalda y la realidad es que todo el tema de obras que teníamos que hacer lo hemos hecho con el dinero de los traspasos porque, exceptuando algún caso muy particular, los bancos no nos han querido financiar".

Esto también invita a la reflexión en el propio club "cuando recuperemos la normalidad absoluta", observa Ortas. "Estamos contentos y agradecidos con toda la ayuda que hemos tenido de muchas entidades estos años pero evidentemente se ha abierto el abanico de posibilidades que se nos han planteado y que no teníamos y que tendremos en cuenta en un futuro. Son vías que no vamos a dejar de lado".

A esa normalidad también contribuirá a no mucho tardar el resultado de la auditoría que hizo el CSD, a instancias de LaLiga, y que extraoficialmente el Huesca sabe que ha salido bien.