El Laredo será un rival "con ilusión y sin complejos"

HUESCA.- La visita del Huesca a Laredo ha despertado un ambiente de gran expectación y enorme ilusión. Es lo que se desprende de las declaraciones del entrenador, Raúl Pérez, y del presidente, José Miguel Sanromán. El club ha tenido que hacer un esfuerzo para acondicionar sus instalaciones de acuerdo con las normas que le envió la Federación Española. Y entre lo más significativo, los nuevos banquillos, con más capacidad que los que había.

El Huesca también deberá adaptarse a las reducidas dimensiones del campo, especialmente porque ha tenido que perder tres metros de ancho y, como reconocía el máximo mandatario, cada saque de banda puede ser como un córner.

Igualmente se ha cuidado al máximo el césped natural, ya que el equipo no ha entrenado en las últimas semanas allí y al juvenil se le trasladó a Noja.

"Todo el mundo tiene la corazonada, la afición está hablando del partido y de las sensaciones. Se ve ilusión y ganas de que llegue el encuentro", declaraba Sanromán.

Sobre el papel que puede hacer su equipo ante el Huesca, "lo más lógico, por presupuesto y por entidad y todo lo que conlleva, es que el Huesca se lleve la eliminatoria. Lo que nos gustaría es que nuestra afición salga satisfecha de la actuación de su equipo".

El Laredo es un club centenario -nació en 1918-, si bien la mayor cota alcanzada fue la Segunda B en las temporadas 87-88 y 89-90. Siempre ha sido uno de los clubes punteros del grupo cántabro de Tercera División, categoría en la que ha militado 44 temporadas. Y ha sido un clásico de los playoffs de ascenso. Coincidió con el Huesca en uno de ellos, en la campaña 92-93, con empate (1-1) en Laredo y goleada del Huesca en El Alcoraz (4-0).

El entrenador, Raúl Pérez, se muestra también contagiado por la ilusión que se percibe en toda la población, en el entorno del equipo y en su propia plantilla.

El equipo se está mostrando muy sólido en el liderato de su grupo de Tercera División. "De cien veces que juguemos un partido así, solo podemos ganar uno. Sabemos lo que tiene jugar contra profesionales", ha manifestado.

Es por ello que, lejos de detenerse en lo que pueda presentar el conjunto oscense en las instalaciones de San Lorenzo, pide "ser nosotros, tener nuestra identidad y personalidad y luchar por ello. Adaptarnos nosotros más que ellos, jugamos en nuestro campo, con nuestra gente y en un horario que nos gusta. Que seamos capaces de que todos esos condicionantes jueguen a nuestro favor. La plantilla está muy convencida de que va a competir y por eso vamos a salir a ganar y sin complejos".

Alejado del fútbol profesional, el Laredo, en palabras de su entrenador, destaca también que "aunque somos un club humilde, somos grandes para organizar y planificar. Hemos preparado todo para que el Huesca se sienta cómodo. Pero cuando el árbitro haga el pitido inicial tenemos que ser un rival hostil, complicado y, por qué no ser capaces de dar una de esas sorpresas que se dan en la vida en las que David puede con Goliat".

La visita del Huesca supone para el club cántabro, señala Raúl Pérez, "la oportunidad para que la afición vea fútbol profesional, un equipo que viene de Primera División, que tiene jugadores top que han estado muchos años en Primera y Segunda División. Viene de dos derrotas en liga pero está en puestos de playoff y ha estado en posición de ascenso. Nos enfrentamos a uno de los mejores equipos de Segunda y posiblemente el año que viene lo volvamos a ver en Primera".

Al frente de la delegación oscense estará el consejero delegado Manolo Torres, junto con el consejero Agustín Pueyo.