Poco premio para un Huesca que mereció mucho más ante el Leganés (0-0)

La SD Huesca ha tenido que conformarse este domingo con un empate a cero de gran valor ante el líder, el Leganés, pero que sabe a poco tras la buena imagen mostrada una vez más en El Alcoraz, donde tuvo varias ocasiones claras para retener los tres puntos en casa. Más si cabe ante un conjunto pepinero que no fue capaz de poner en apuros a los de Hidalgo. Merecieron más los locales.

No hubo tregua desde los primeros instantes del encuentro, en los que el Huesca salió decidido a dar el primer susto de la tarde al líder en El Alcoraz. Para ello habría que mover rápido el esférico, algo que el Leganés trató de hacer para desarbolar la defensa tan bien plantada y expeditiva del equipo azulgrana.

Y le pudo costar caro muy pronto al Huesca, aunque el línea y el fuera de juego de Raba evitaron cualquier mal mayor para los azulgranas. Álvaro tuvo que sacar la primera ocasión clara del choque a disparo lejano de Raba, aunque acabó anulada.

Elady respondió en la siguiente jugada, tras una gran acción colectiva entre Valentín y Nieto que éste último logró aprovechar para meter un balón al área pequeña, donde el jienense la mandó por arriba. No obstante, también fue anulada por fuera de juego.

Aunque la igualdad primaba durante los primeros instantes del choque, cualquier detalle podía desequilibrar la balanza, tal y como estuvo a punto de ocurrir tras una acción maradoniana de Juan Cruz, deshaciéndose de cualquier marca azulgrana y llegando a colarse en el área hasta pegarle de puntera, aunque muy desviado. Todo se mantenía en igualdad de condiciones, aunque con la pequeña diferencia de que el Huesca estaba llegando con mucho más poderío en cada jugada a balón parado.

Tuvo hasta cuatro saques de esquina en los cuales hubo siempre opción de remate para los locales. Y la más clara de todo el partido -esta vez sí legal- la tuvo Elady con un potente remate de cabeza absolutamente a placer y cerca del área pequeña, aunque sin dirección alguna y muy por encima de la meta de Diego Conde.

A pesar de un tramo en el que las imprecisiones se adueñaron del Huesca, concretamente sobre el ecuador de la primera mitad, llegó a los minutos finales con mayor dominio, criterio y presencia en campo contrario gracias al buen papel de Javi Martínez en el centro del campo y a la ya habitual verticalidad de Valentín, sin restarle importancia al papel de Vallejo. El equipo gozó de numerosos acercamientos que estuvieron a punto de darle la alegría del gol, pero los de Borja Jiménez se mostraron lo suficientemente sólidos para llegar al descanso con empate a nada en el marcador.

Con el Leganés alejado de cualquier peligro ofensivo, el equipo entrenado por Hidalgo llegó a vestuarios con mejores sensaciones que el líder de la categoría, incapaz de incomodar lo suficiente a los azulgranas.

Tras la vuelta de vestuarios, el encuentro se reinició con un guion muy similar al de la primera parte, con un Huesca presionante y a la caza de cualquier error contrario para generar cualquier peligro posible.

Necesitaba muy poco el Leganés para meter miedo, y Cruz volvió a estar a punto de hacerlo tras un buen desmarque que le permitió abrir el campo hacia Cisse, aunque su disparo terminó tapado por Pulido. Empezó a encontrarse mucho más cómodo, permutando por dentro y cambiando de orientación para encontrar los espacios entre la zaga azulgrana. Álvaro tuvo que salir para evitar un mano a mano de Diego García tras un gran pase entre líneas de Portillo.

Las imprecisiones en medio campo volvieron a ser el principal enemigo de un Huesca durante los primeros diez minutos, algo que detectó el rival y que le permitió adelantar líneas para provocar el error azulgrana en salida de balón, pero se levantó rápido de dichos momentos de incertidumbre.

Y lo hizo, como no podía ser de otra forma, con otra acción a balón parado. Volvió a lanzarlo Sielva, y esta vez remató Loureiro en primera instancia, aunque Conde se hizo grande al evitar el gol azulgrana. Se hizo enorme en la segunda jugada, ya que también evitó el tanto al disparo de Kortajarena, que fue a bocajarro y casi sin tiempo para reaccionar. Apretó el Huesca y merecía el gol, pero seguía sin llegar.

Los minutos pasaban y el duelo se iba calentando cada vez más, con un elevado número de tarjetas amarillas y con diversos cara a cara que terminó en una pequeña tangana por un golpe que recibió Loureiro en el lanzamiento de una falta, aunque Milla Alvéndiz lo supo resolver rápido cortando por lo sano a través de varias amonestaciones.

A pesar del empate, el encuentro volvió a estar en un punto en el que cualquier acción podía terminar en premio o castigo. Y claro ejemplo fue un mal entendimiento en el área del Huesca que estuvo a punto de costarle el gol en contra, después de un pase raso lateral de Cruz ante el que se estorbaron Loureiro y Álvaro.

En el constante reparto de golpes Vallejo tuvo en sus botas otra ocasión clarísima para hacer el primero casi en el minuto 70. Una recuperación impecable de Martos acabó con un gran recorte de Javi Martínez y pase hacia el andaluz, que desde dentro del área le pegó con todo el alma de primeras y muy desviado por encima de la meta de Conde.

Acabó muy entero el conjunto de Hidalgo, que no se conformó con el empate entrados ya en los últimos quince minutos del encuentro. Incluso terminó mejor, asentado en campo contrario gracias a un Javi Martínez incansable y casi con alma de delantero. 

Pero no hubo premio mayor que el del empate para la SD Huesca. A pesar de intentarlo hasta el final, el conjunto azulgrana debe conformarse con un punto de gran valor ante el líder, el cual fue incapaz de ponerle en apuros reales.

Un punto ,ya con 42 en el casillero, que supone otro paso más hacia la permanencia, la cual está cada vez más cerca para los azulgranas. Además, undécimo partido consecutivo sin perder para un Huesca complejísimo de batir hasta para el equipo mejor clasificado.