La amenaza del descenso, a tres puntos

Once partidos consecutivos sin perder fueron un soplo de aire fresco para una SD Huesca que, antes de comenzar esa racha, al término de la jornada 23, era el equipo que marcaba la última plaza castigada con el descenso. Mucho ha llovido desde entonces y el equipo dirigido por Antonio Hidalgo ha logrado escalar posiciones y salir de esa situación por méritos propios. Sin embargo, los dos tropiezos consecutivos ante Ferrol y Zaragoza, sumado a la increíble resiliencia que están mostrando los equipos de la parte baja de la tabla, han propiciado que los fantasmas del descenso vuelvan a rondar sobre la capital altoaragonesa.

Y es que, cuando finalice la jornada 36 (independientemente de lo que suceda en el Cartagena-Oviedo de esta noche), el Huesca pasará la semana a tres puntos de la zona caliente de la clasificación, bien sea tomando como referencia al equipo murciano o al Albacete. Equipos que parecían sentenciados, como el Amorebieta en su día o el Villarreal B las últimas semanas, siguen sumando a un ritmo preocupante para los intereses azulgranas. En el día de ayer fue turno del Albacete, que ganaba al Eldense y acumula dos victorias consecutivas y del Mirandés, que se imponía en el derbi burgalés situándose con 41 puntos.

Así, el Huesca debe volver a ganar -o al menos sumar- si no quiere complicarse la vida en las seis jornadas que restan para finalizar la Liga Hypermotion. Los rivales están dejando claro que no van a dar su brazo a torcer, por lo que el equipo de Antonio Hidalgo tendrá que viajar a Valladolid con la necesidad, que todavía no obligación, de volver a casa con algo positivo en forma de puntos. Bien es cierto que el técnico catalán no ha modificado su discurso en ningún momento durante la dinámica positiva del equipo, por lo que la hoja de ruta no se verá modificada ya que la situación no es desconocida para ellos.

La importancia del golaveraje

Aunque todavía no es momento de sacar la calculadora -ni es deseable que esa situación tenga que llegar-, conviene hacer memoria para recordar la posición en la que se queda la SD Huesca con respecto al resto de rivales que pelean por salvar la categoría (sin entrar en posibles triples o cuádruples empates).

Empezando de abajo a arriba, en el duelo con el Villareal B saldría vencedor el equipo azulgrana, puesto que empataron ambos partidos pero la diferencia de goles sería determinante en este sentido. Al Andorra también le superaría gracias al 2-0 que le endosó en El Alcoraz. Lo mismo sucede con el Amorebieta, pero en este caso merced a su victoria 0-1 en Lezama. Habrá que esperar a la penúltima jornada para saber a ciencia cierta cómo queda con respecto al Cartagena, pero el 3-0 conseguido en la primera vuelta se antoja definitivo. Tranquilidad en este sentido.

Fuera del descenso aparece, en estos momentos, el Albacete, otro conjunto al que los oscenses le ganarán el golaveraje a no ser que cambie mucho la cosa en la diferencia general de tantos. Al Alcorcón el conjunto azulgrana le venció en los dos partidos y en el duelo frente al Mirandés también sale ganando. Otra satisfacción.

Pese a la derrota del sábado, el Huesca sale favorecido en el duelo particular contra el Zaragoza gracias a su victoria 0-2 en La Romareda. El único equipo entre los implicados con el que la SD Huesca saldría perjudicada en caso de empate es el Eldense, invitado inesperado de última hora que acumula cinco derrotas consecutivas que le han llevado a entrar en las quinielas del descenso.

Está claro que los azulgranas han hecho los deberes contra los equipos de la zona baja de la tabla, pero las próximas semanas deberá dar la talla contra rivales que están peleando por el ascenso si no quiere sufrir hasta el final.