SD Huesca

segunda división

La permanencia tendrá que esperar para un Huesca goleado por el Racing (0-3)

El conjunto azulgrana no pudo hacer frente a la efectividad goleadora de los cántabros, sumándose además otro nuevo encuentro discreto e irregular

Instantánea del encuentro de este sábado ante el Racing.
Instantánea del encuentro de este sábado ante el Racing.
Verónica Lacasa

La SD Huesca ha vuelto a tropezar en la misma piedra sábado, tras haber caído en El Alcoraz ante el Racing de Santander por 0-3. Una dura goleada que no hace mérito a las ocasiones que tuvo el conjunto azulgrana en la segunda mitad, pero que sí reflejó una semana más las limitaciones de una plantilla a la que le va a costar sangre y sudor conseguir la permanencia este curso. Ni el juego, ni las decisiones arbitrales de González Díaz y el VAR fueron justos tampoco con un Huesca que sigue con 45 puntos.

Con tanto en juego para ambos equipos -permanencia frente a ascenso-, la necesidad por ganar quedó patente desde un primer momento. Principalmente el Racing, que se adueñó de la posesión con rapidez en busca de dar el primer susto de la tarde. Por su parte, al Huesca le costó entrar al partido, al igual que le faltaron las ideas para contrarrestar la mayoría de jugadas rivales.

Los de Hidalgo se encontraron con muchas dificultades para generar algo de peligro en los primeros diez minutos del partido. Sobre todo desde el centro del campo, donde Vicente, Morante y Aldasoro se mostraron con planas capacidades para recuperar en campo contrario y pelear los espacios que dejaba el Huesca. A raíz de ello llegó el primero disparo de Morante, aunque terminó por encima de la meta de Álvaro.

Era más que evidente que al Huesca le iba a resultar muy complejo encontrar las debilidades defensivas de un Racing que se mostró bien plantado en cada posesión azulgrana. No obstante, en un desajuste rival Kento consiguió recuperar el esférico en tres cuartos de campo, pero su centro tocó en Hernando y acabó en las manos de Ezkieta.

Los contrataques, a priori, debían ser la mejor de las opciones del conjunto oscense para poner en apuros a los cántabros, aunque la más clara del encuentro la consiguió construyendo una acción en campo propio. Concretamente desde Pulido, que ganó metros e hizo un cambio de orientación a Vilarrasa a la banda izquierda, donde el catalán perdió el balón cerca de la frontal y Kento lo aprovechó para pegarle casi a la media vuelta. No obstante, el meta del Racing se estiró bien para evitar el gol del Huesca.

A raíz de ello los de Hidalgo ganaron en confianza, metros y opciones cerca del área contraria, y tuvo oportunidad de adelantarse por medio de varios saques de esquina en los que la zaga visitante se mostró muy contundente. Aún así, el más mínimo destello rival era sinónimo de peligro, algo de lo que también debía estar muy atento en toda transición defensiva para responder con alguna nueva contra en la que Kento se erigió como el líder y organizador del Huesca.

Sin embargo, tal y como avisaba el Racing en cada acercamiento, era capaz de hacer mucho daño. Y lo hizo para desgracia de los locales con el primer gol de la tarde por medio de Nieto en propia puerta, tras un pase entre líneas de Vicente a Arana para que éste le pegase desde el interior del área. Álvaro la paró en primera instancia con ayuda del palo corto, aunque tras varios barullos el defensa azulgrana despejó mal y la coló en su portería. A pesar de un posible fuera de juego en el inicio de la jugada o una falta sobre Álvaro en el primer rechace, González Díaz acabó dando el tanto por válido.

Fue un gran varapalo para el Huesca, que a pesar de intentarlo en varias ocasiones a través de centros laterales, faltas y corners, se marchó al descanso por detrás en el marcador y obligados a reaccionar en los segundos 45 minutos si quería atar la permanencia en El Alcoraz.

Tras la vuelta de vestuarios y ante el poco peligro ofensivo que mostró su equipo, Hidalgo no tardó en mover ficha y dio entrada a Valentín y Javi Martínez en detrimento de Blasco y Balboa. Así, pasó de una formación 5-3-2 a un 4-1-2-3 en busca del gol que le metiera en el encuentro.

Para mayor desgracia azulgrana, lo único que se encontró el Huesca fue el segundo del Racing. Esta vez en el 49 y a través de un saque de esquina, en el que Arana le ganó la posición a Valentín con enorme facilidad para poner tierra de por medio. La cosa, como en los últimos choques en casa, fue de mal en peor, por lo que solo quedaba creer en la épica.

Solo valía ir arriba a por el tanto que recortara distancias, y aunque lo buscó se le estaba resistiendo. Valentín, hasta en dos ocasiones, fue el gran desequilibrante por la banda derecha, con sendas jugadas en las que Nieto terminó disparando desde al frontal primero y Kento no termina llegando al balón en la segunda ocasión. Para culminar, Vallejo tuvo otra poco después, nuevamente a centro de Valentín, aunque su disparo se fue alto.

Mientras tanto, el Racing buscaba darle pausa a un choque que se le estaba complicando con los numerosos acercamientos del Huesca, pero sobrevivía con un marcador bastante favorable a falta de media hora para el final.

La imagen había cambiado en los de Hidalgo, que no pararon de insistir y se merecieron más en la segunda mitad. Claro ejemplo de ello fue el potente disparo que se sacó Nieto desde lejos del área, al cual tuvo que salir al rescate Ezkieta para salvar a los suyos y evitar el tanto local.

Mientras el Racing sobrevivía, al Huesca se le acababa el tiempo y seguía sin estrenarse en el partido. El arreón anterior no fue suficiente, y eso también lo acusó el conjunto azulgrana en el físico y en el poderío para seguir presionando arriba en busca del gol que les diese vida.

Ante la urgencia y la necesidad, con el equipo volcado arriba, Peque pudo hacer el de la sentencia en un mano a mano que sacó Álvaro, mientras que el Huesca respondió con un centro lateral en el que Javi Martínez, ya desde dentro del área y con el pase posterior de Joaquín, pudo poner el 1-2, aunque Alves la sacó bajo palos cuando todo el mundo cantaba gol. 

Finalmente y con el paso de los últimos minutos, no le salió nada a un Huesca que lo intentó, pero que no le fue suficiente con lo que hizo ni siquiera para sacar un punto en casa. 

Eso sí, con más corazón que cabeza, y con los balonazos y centros como último recurso, llegó el gol del Huesca en el 91, tras un córner que le cayó en las botas a Joaquín. Su disparo terminó tocando en Javi Martínez y entrando en la meta racinguista, pero el VAR y González Díaz acabaron dictaminando que era mano y, por consiguiente, no gol. 

No pudo caldearse más el ambiente, y Toni Salafranca (segundo entrenador  del Huesca), terminó expulsado por protestar. 

Además, para mayor colmo, Ekain hizo el tercero y definitivo para redondear otro fatídico partido en casa para el Huesca.

Con ello concluyó el encuentro en El Alcoraz, donde al conjunto de Hidalgo se le sigue resistiendo ser un equipo fiable en este tramo tan decisivo del campeonato liguero. La semana que viene, a Cartagena.