El servicio de limpieza viaria de Huesca sigue sin adjudicarse tras casi dos años

HUESCA.- El Ayuntamiento deberá sacar a licitación de nuevo la limpieza viaria después de que haya prosperado un recurso de una de las empresas que optaron al anterior concurso. Así ya serán 20 meses los que el equipo de gobierno lleva intentando sacar adelante la adjudicación de este servicio, tras el fracaso de la remunicipalización, uno de los compromisos del acuerdo de investidura de la actual corporación. Una situación que generó este miércoles prácticamente el único debate que hubo en el pleno municipal, en el que el equipo de Gobierno comunicó que agilizará la tramitación para dar estabilidad a un servicio fundamental.

Los grupos municipales conocieron el miércules el último acuerdo del Tribunal Administrativo de Contratos Públicos de Aragón (Tacpa) por el que estimaba el recurso de Valoriza contra la adjudicación del servicio a Urbaser el pasado diciembre por 7,3 millones de euros. Determina que ninguna de las licitadoras admitidas cumplía con las condiciones mínimas del pliego de condiciones técnicas, por lo que todas quedan excluidas y el Ayuntamiento debe declarar desierta la licitación.

Así que el proceso comenzará otra vez, ya con la nueva corporación, y que posiblemente no se resolverá hasta dentro de cinco o seis meses. El servicio seguirá prestándolo la empresa pública Grhusa, encomienda que se dejó abierta hasta la incorporación de la nueva empresa. La situación, aclaró el concejal responsable de Contratación, Fernando Gállego, vuelve a ser la misma que en mayo de 2017, cuando se produjo la encomienda de gestión a la empresa pública. "Iniciaremos un nuevo proceso, que espero que vaya mejor, porque hemos entrado en una dinámica tras el recurso del Tacpa que ha llevado a disputas entre las propias empresas que están más ocupadas en litigar entre ellas que en hacer unas buenas ofertas que se hubieran ajustado al pliego".

Por otro lado, con la abstención del PP, el resto de grupos municipales dieron su apoyo a la solicitud al ministerio de Fomento para la cesión de un tramo de la vía interurbana de la N-330 que va desde la rotonda de la autovía de Zaragoza al acceso al IES Pirámide. Esta petición esta motivada, explicó el concejal de Hacienda, José María Romance, porque el Ayuntamiento quiere acometer varias obras para la mejora de la recogida de aguas y la instalación de gas para un nuevo horno crematorio en el cementerio o la inclusión de un carril bici. Si pasara a tener carácter urbano ahorraría numerosas gestiones para tramitar los permisos al ministerio.

La manera en cómo se ha gestionado este expediente generó la negativa del PP, según explicó la concejala Gemma Allué, quien no comprendía por qué se producía la decisión en este momento sin ningún tipo de compensación al Ayuntamiento. Romance recordó que se trata de una "zona interurbana", no de una travesía, que no entra en el ciudad, un procedimiento con sus propias instrucciones, aparte de que el pasado en noviembre Fomento realizó obras de mejora por valor de 84.000 euros, con lo cual se entrega en "perfectas condiciones".