Osce Biella insiste en la máxima preservación del edificio de la plaza San Pedro 1

HUESCA.- La Asociación de Vecinos del Casco Viejo, Osce Biella, ha lamentado la decisión del Ayuntamiento, pendiente del visto bueno de Patrimonio, de que el derribo del edificio del número 1 de la plaza de San Pedro sea completo. La entidad insiste en la necesidad de la máxima preservación del inmueble atendiendo a sus valores arquitectónicos e históricos y al contexto urbano en el que se halla: el entorno de un Bien de Interés Cultural como es la iglesia de San Pedro el Viejo.

La comisión de Urbanismo acordó el pasado jueves optar por un derribo completo del edificio y solicitar a Patrimonio que prescriba que se reconstruya la fachada en los parámetros actuales. Alega el Consistorio el coste que le puede suponer mantener la fachada con apeos durante dos años, hasta que, como se prevé, deba iniciar el proceso de sustitución de la propiedad para edificar en el solar resultante. El derribo lo va a llevar a cabo el Consistorio de manera subsidiaria, ante el incumplimiento de la propiedad, Masari.

Osce Biella remitió a la comisión de Urbanismo un informe con 18 argumentos para sostener la obligatoriedad de mantener al máximo el edificio.

Recuerda que está protegido tanto por la declaración de conjunto histórico-artístico del Casco Antiguo como por la Ley de Patrimonio Cultural Aragonés por ser entorno de San Pedro El Viejo.

Manifiesta Osce Biella que con este marco legal, es necesario aplicar un concepto de conservación integrada. El edificio, señala, está ubicado en una manzana donde todos los inmuebles son de interés histórico, construidos entre los siglos XVII y XIX. Además, está situado en una manzana donde ya se tiró un edificio del XVII y ha quedado un solar sin reconstruir.

Hace referencia a la "nobleza y sostenibilidad en los materiales y procesos tradicionales" y la pérdida que el derribo supondría en elementos destacados tanto constructivos como artesanos.

Habla entre estos elementos de galerías de arquillos renacentistas aragoneses, cajas de escalera de interés, forjas y carpinterías, vanos, embaldosados, miradores, bodegas, entre otros elementos "de alto valor constructivo y decorativo".

Por último, advierte el informe del "poco interés del barrio por experimentos constructivos, de dudosa armonía", que tampoco favorecen el tejido social.