Luis Felipe: "La sintonía con los portavoces es buena; otra cosa será la negociación"

HUESCA.- El alcalde, Luis Felipe, afronta el cuatrimestre con el reto de lograr los primeros acuerdos para aprobar aspectos fundamentales como las ordenanzas y los presupuestos. Insiste en que hablará con todos los grupos políticos y que, por el momento, no se plantea un pacto de mandato con Ciudadanos.

¿Cuáles son sus objetivos fundamentales hasta final de año–

Hay dos cuestiones fundamentales que van a marcar el final de año y 2020: debate y aprobación de ordenanzas y del presupuesto. No tenemos mayoría en el pleno, con lo cual tenemos que intentar llegar a acuerdos con los grupos municipales y sabemos cuál es la tendencia de la mayoría del pleno: rebaja fiscal y control del gasto, que compartimos y no será difícil llegar a un acuerdo. Al mismo tiempo, darle un aire a los presupuestos participativos; lo que es participación ciudadana en base al propio debate de los presupuestos de los grupos políticos. Es bueno que se informe y se puedan asumir propuestas de la sociedad. Los concejales tienen la encomienda de que se preste especial atención a los espacios de participación, y más en el momento que vive el tejido asociativo.

¿El equipo de gobierno irá con una propuesta de ordenanzas a los grupos o negociará antes–

Salvo Vox, que es una formación nueva, las políticas que pueden plantear los grupos son conocidas. En base a eso sí que es bueno que el equipo de gobierno presente una propuesta para negociar. O presentas un papel de entrada o luego cuesta mucho ponerse a cerrar un documento. Es mejor presentar uno y sobre ese, negociar y acordar.

Sobre el presupuesto aprobado para este año ¿Le queda margen de modificación y hasta qué punto de ejecución hasta final de año–

Los años de elecciones son, normalmente, de baja ejecución. Se suele dar que dentro del escaso margen de los últimos meses del año se produzca alguna modificación presupuestaria que dé respuesta a alguna de las prioridades o algunas de las partidas no ejecutadas. Con eso tendrá que operar el concejal de Hacienda dando operatividad a algunos proyectos que urgen y que lógicamente necesitarán de recursos económicos y habrá que hacer alguna modificación.

La consejera de Presidencia afirmaba esta semana que no se iba a modificar la ley de financiación local que quedó en trámite la legislatura pasada ¿Va a insistir en una consideración singular para la ciudad–

Espero que los grupos de las Cortes recojan algunas de las cuestiones que planteé en una comparecencia al final del mandato. Algunas ya las recoge ese proyecto de ley, como que no estemos tutelados por la Comunidad Autónoma y tengamos autonomía para decidir dónde y cómo gastamos el dinero. El objetivo es que tengamos un tratamiento más singular por ser la segunda ciudad de Aragón y capital de provincia respecto a esa financiación.

En contratación hay recurrentes problemas ¿Qué medidas se van a adoptar–

Se ha hecho un refuerzo de la unidad de contratación. De lo que era una unidad con cuatro personas, ahora hay ocho. Y aún así, sigue siendo insuficiente porque se está viendo que el proceso de la ley de contratos conlleva una carga burocrática tremenda y que surjan dificultades, con procedimientos que se alargan porque hay que cumplimentar documentación. En segundo lugar, los recursos al Tacpa: aquí el Gobierno de Aragón o dota de más recursos al propio Tribunal Administrativo o afronta un cambio normativo. El recurso paraliza los procesos, alarga y genera un problema a las administraciones. No es un problema de previsión, también de que la propia administración pueda digerir la carga burocrática.

En los últimos meses, la comparativa del paro interanual apunta a estancamiento de los datos e incluso un retroceso en agosto ¿Preocupa la situación económica de la ciudad–

Me preocupa la situación general, lo que decís los medios con recesión en Alemania, una situación de inestabilidad en Italia, también en España, con un conflicto internacional de comercio. No hay un horizonte muy positivo. Creo que los síntomas que pueden apreciarse aquí se aprecian en el conjunto de Aragón y la economía española. No es algo concreto de aquí. Eso sí, el empleo tiene que ser la primera prioridad para un gobernante.

Ha citado la participación ciudadana. En los últimos días se ha puesto si cabe más de manifiesto la crisis en el proceso asociativo en los barrios, que contrasta con la vitalidad en otros sectores. ¿Le preocupa la situación–

Sí. Y tenemos que hacer todos un esfuerzo por que el tejido vecinal tenga un protagonismo en las decisiones de la ciudad. Es necesario que en ese esfuerzo de potenciación del movimiento vecinal, el Ayuntamiento esté a la cabeza y dote de herramientas y de espacios de participación, pero no todo depende del Ayuntamiento. Hay una parte que depende de las asambleas vecinales de constituir esas juntas directivas que resuelvan las dificultades que se están dando.

A la vista está que Ciudadanos tiene buena relación con el PSOE tanto en la Comarca de La Hoya como en la Diputación ¿Habrá acuerdo en el Ayuntamiento, será su socio preferente de sus conversaciones–

De momento hay un gobierno socialista y al no tener una mayoría suficiente nos va a llevar a que busquemos acuerdos con el resto de grupos. Vamos a ver cuál es la voluntad de los otros grupos por la gobernabilidad. He recibido algún anuncio del grupo popular de tender la mano y también he visto buena voluntad de Ciudadanos y Con Huesca, que reivindica que haya propuestas en el Gobierno municipal que tengan en cuenta una visión de izquierdas. Hoy tengo buena relación con todos los grupos. La sintonía con los portavoces es buena, otra cosa será la negociación política.