Recursos para mejorar el comercio de Huesca y aumentar las ventas a coste cero

HUESCA.- ¿El escaparate resulta atractivo? ¿Atendemos bien a los clientes? ¿Es fácil comprar en nuestra web? ¿A qué precio tengo que vender para que obtener rentabilidad? Son preguntas que puede hacerse un comerciante que ni tiene departamento de marketing, ni de gestión empresarial, ni de absolutamente nada.

Y, además, no es lo suyo. Lo de Mónica Asesio son los abalorios y la bisutería, que vende en Cositas de Huesca, la tienda que tiene abierta en la calle Berenguer de la capital oscense.

Diez años después de su apertura, participó en buena parte de los programas dirigidos al comercio de la Cámara de Comercio e Industria de Huesca. Y todo de forma gratuita. La aplicación de sus sugerencias ha hecho que su negocio crezca y ha generado empleo.

El departamento de Programas Sectoriales de la Cámara trabaja con el comercio minorista, que vende al consumidor final. Por un lado, con Cámaras de España y con fondos europeos, ofrece formación. Por otro lado, con el Gobierno de Aragón y con fondos de la Comunidad Autónoma, dentro del plan cameral de competitividad, la ley establecía que se tienen que desarrollar un plan internacional y otro de competitividad.

Dentro de este último, junto con el PAED, está el programa de comercio, en el que se van a introducir modificaciones para 2020, según explica Paula Lacasa, del departamento de Programas Sectoriales de la Cámara. Algunos también están relacionados con el Plan de Equipamiento Comercial de Aragón.

En estos momentos trabajan en el programa del Multiservicio Rural, que apoya a los ayuntamientos para abrir comercios en el medio rural. Por otro lado, en la modernización y reforma de establecimientos comerciales con el diagnóstico del punto de venta, un programa "integral" en el que se revisa desde la colocación de los productos, el escaparate, la iluminación...

Este es uno en los que ha participado Mónica Asesio, pero no es el único. "Me hicieron un estudio de cómo estaba todo el comercio, cómo exponer productos... Además, me hicieron el informe del "cliente misterioso", que te hace una compra para ver cómo atiendes; un análisis de la página web... A mí me hicieron todo tipo de estudios", explica Mónica Asesio, que resalta la disposición y la eficiencia del personal de la Cámara para resolver sus necesidades.

Precisamente, el "cliente misterioso" es otro de los programas al que se apunta el comerciante para que lo visiten sin saberlo y conocer después la valoración. Del mismo modo, la Cámara asesora en tecnologías de la información, en Recursos Humanos, en gestión empresarial (económico-financiera, gestión de indicadores comerciales y análisis de tendencias en el sector), da un servicio de asesoría sobre etiquetado de productos, rebajas, reclamaciones..., o en comunicación y publicidad.

"Hay cosas que me van venido muy bien y otras que pasé por alto en su momento y que apliqué después. Un comerciante no puede dedicar tiempo a muchas de estas cuestiones que son importantes para el negocio, por lo que asesoramiento de la Cámara ayuda muchísimo", señala. "Siempre son sugerencias de mejora", apunta Paula Lacasa, que resalta que no les envían el informe sino que el personal acude al comercio para explicárselo con detalle.

Mónica Asesio convirtió su afición en su modo de vida y comenzó con otra socia en 2004. Fue en 2015 cuando solicitó todo este análisis porque empezó de cero y con la capitalización del paro como único recurso. Para los emprendedores, la Cámara también ofrece muchos recursos que les pueden hacer ver la viabilidad de su negocio. Otro de los programas vinculados al comercio es la ayuda para el relevo generacional.

"Ahora también me están asesorando porque este verano tomé la decisión de dedicarme a otra cosa. Me gustaría traspasar el negocio porque realmente funciona. Tengo mucho trabajo y me da pena que nadie se ocupe, porque da para uno o dos sueldos, según cómo se gestione", comenta Asesio, que ha tenido empleadas. Ahora, quiere dedicarse a la Educación Social y a desarrollar otras artes, como la pintura.

A su juicio, es muy importante para un pequeño establecimiento estar en la Cámara de Comercio y en organizaciones como la Asociación de Comerciantes y Fecos para tener asesoramiento. Y también por la formación, apunta, ya que "en la Cámara hacen cursos que se adaptan al horario del comercio para que podamos asistir y, además, son gratuitos".