Huesca

NAVIDAD

Los oscenses ultiman una Nochevieja con una oferta floja en ocio y cotillones

Algunos establecimientos hoteleros ofrecen cenas y hay bares nocturnos que han preparado fiestas con aforo limitado

Los oscenses ultiman una Nochevieja con una oferta floja en ocio y cotillones
Los oscenses ultiman una Nochevieja con una oferta floja en ocio y cotillones

HUESCA.- Los oscenses apuran estos días los preparativos de última hora para celebrar una Nochevieja sin grandes cotillones en la ciudad. Atrás han quedado las concurridas despedidas de año que tenían lugar en el Palacio de Congresos de la ciudad o en su plaza de toros, unas citas organizadas por el Ayuntamiento o por las peñas de la capital altoaragonesa.

Así que, los vecinos de Huesca se decantan este año por los cotillones de aforo limitado que ofrecen algunos locales nocturnos y por las cenas en los hoteles, donde la fiesta se prolongará hasta las tres o cuatro horas de la madrugada, no más. Ante la escasa oferta de ocio, los oscenses también optan por montar su propias fiestas en casa, provistos de bolsas de cotillón y matasuegras, para después salir por los bares de la capital a tomar unas copas.

Muchos de ellos dejan de lado las ganas de cocinar y se decantan por encargar menús de Nochevieja a restaurantes como el Lillas Pastia o el Flor de Huesca, que preparan dos deliciosas propuestas gastronómicas, una a 35 euros y otra a 50.

El chef Carmelo Bosque, quien además es presidente de la Asociación Provincial de Hostelería y Turismo de Huesca, no abre en Nochevieja su restaurante Lillas Pastia pero sí que elaborará junto al Flor de Huesca unos 400 menús para llevar. "Parece que a la gente le gusta cada vez menos cocinar y se decanta por este servicio. Como hay pocos restaurantes abiertos los oscenses tampoco se quieren complicar en los fogones", valora este chef con una estrella Michelin que ha diseñado un menú compuesto por un entrante de marisco, ibéricos y ahumados, merluza rellena con txangurro gratinada y dos segundos a elegir: media paletilla de ternasco al horno con patatas a lo pobre o confit de pato asado con patatas y hongos.

De postre, un crocant de chocolate blanco relleno de sorbete de cacao y las uvas de la suerte, detalla Bosque, que indica que el Lillas Pastia tomará nota de los pedidos de menús de Nochevieja para llevar hasta este lunes, incluido. Y como presidente de los hosteleros también plantea que "en Huesca falta esa opción para divertirse en Nochevieja, que hace años incluía grandes cotillones. Eso ya no existe y la gente se va repartiendo por las casas o se decanta por alojamientos de turismo rural para grupos de amigos".

Por su parte, la Cocina de José Fernández también brinda para este día un servicio de catering con tres menús navideños "take away" desde sus dos tiendas de la capital altoaragonesa. Hay menús cerrados para grupos que incluyen hasta una vajilla desechable, para no tener que fregar después, el pan, las uvas y la comida. "Mucha gente coge el menú completo para no tener que hacer nada", explican desde esta empresa que ha recibido cientos de encargos.

Por su parte, el Hotel Pedro I ofrecerá una cena de Nochevieja para unas 250 personas, cuyas reservas comenzaron a cerrarse hace unos tres o cuatro meses. Ángel Guerrero, director de este establecimiento hotelero, indica que la celebración no incluye cotillón y no sobrepasará las tres de la mañana. "No es un cotillón propiamente dicho", puntualiza Guerrero, que añade que esta cena sí que incluye dos horas de música disco. El menú ofrece un surtido de ibéricos acompañado de pan de cristal, brandada de bacalao con caviar de trucha imperial, royal de foie con higo confitado y una deliciosa vieira con trufa negra. De segundo habrá lomo de lubina asado con crema de txangurro, jarrete de ternasco de Aragón y de postre un "festival de chocolates", turrones y caprichos de Navidad y uvas de la suerte.

También se ha colgado el cartel de "completo" en el Hotel Sancho Abarca, que ha preparado una cena con cotillón y fiesta para 200 personas que se prolongará hasta las cuatro de la madrugada. Roberto Pac, director del establecimiento, indica que las reservas se llenaron hace ya unas dos semanas.

"En Nochevieja recibimos a mucho cliente habitual y a otros que se acercan por esta fecha a la ciudad", comenta Pac, que considera que la falta de ofertas de cotillón en Huesca hace "que la gente joven se quede descolgada, por lo que debería volver otra vez la opción de hace unos años".

Desde la plaza de Los Fueros el Disco Bar Tararí Huesca celebrará la Nochevieja con una fiesta de cotillón, con barra libre incluida y aforo limitado para 125 personas. Las entradas, cuyo precio actual es de 50 euros, incluyen además de las copas, recena, un bingo en el que se sorteará un patinete eléctrico y la fiesta estará amenizada por la música del Dj Adrián Roche. Andrés Bailo valora desde este disco bar que la oferta de cotillones en Huesca es más bien escasa, "creo que se podría hacer algo más. El público quiere pasarlo bien y nuestras entradas se empezaron a vender ya a principios de noviembre".

Con más o menos opciones de cotillón y ocio nocturno, lo cierto es que los oscenses se tomarán las uvas al son de las campanadas pensando en sus grandes deseos para 2020 y esperando tener un año de lo más feliz.